Circular al Gabaro y Manchoya desde Oto 2019-08-24 09:15

En varias ocasiones he estado en el Pelopin, y siempre me quede con ganas se seguir el cordal hasta el Manchoya, pero por A ó por B, nunca lo realicé, y hoy 24 de Agosto quiero hacer algo tranquilo y esta es la ocasión.
En principio pensé en iniciar la subida desde la boca E del Túnel de Cotefablo, pero ello me implicaba la ida y la vuelta por el mismo camino, y gustan más las rutas circulares, cuando se puede, por lo que la preparé desde el pueblo de Oto, subiendo por la Ermita de la Asunción y bajando por el Puerto de Yosa.
A las 8.45 horas estoy aparcado junto al abrevadero de Oto, justo donde inicia el sendero del GR-15 que va al Puerto de Yosa y Yesero, y por donde regresaré por la tarde. Toda la zona del Camping estaba imposible de aparcar.
Me dirijo hacía el Camping donde veo la única indicación a la Ermita de la Asunción, que me lleva a una pista, la cual sigo hasta que un mojón me invita a abandonar la pista por un sendero que me llevará hasta la Ermita. Este sendero es un PR, pero carente o con muy pocas marcas, aunque tampoco son necesarias hasta la Ermita, es un camino muy transitado por lo que la senda esta muy marcada.
De la Ermita sale otro sendero, en algunos cortos tramos, con perdida de huella pero con dirección y sentido evidente, que nos saca a una pista que ya no abandonaremos hasta alcanzar la loma de cambio de vertientes, entre los barrancos de Casanueva y el de Abate. Esta pista hace unos grandes bucles, difíciles de atajar, ya que la vegetación es muy cerrada.
La pista sigue por la divisoria de aguas, hasta un momento que empieza a descender, y aprovecho para abandonarla y seguir toda la arista N del Gabaro, al principio por zona herbosa, pero luego por zona de pinos con bastante vegetación que dificultaba el movimiento, por lo que decidí avanzar por el borde de la arista del Barranco de Casanueva, despejado de vegetación.
Esto fue el tramos más duro y complicado de la ruta, por la falta de senda y los 250 m. de desnivel a superar.
Cuando llego a Punta Gabaro son cerca de la 13 horas y no con muchas paradas, lo que indica que mi velocidad de crucero va cada vez a menos.
Breve parada en Punta Gabaro para contemplar el paisaje, algunas fotos y continuar cómodamente al Manchoya, donde llegué en 20 minutos. Aquí,como cima principal estuve hasta las 14 horas disfrutando del entorno y de la agradable temperatura, pues aunque el día fue caluroso corría una ligera brisa que hacía la estancia muy agradable. No pude prolongarlo más ya que tenía intención de comer y reposar en Yosa y aún quedaba bastante recorrido.
La larga y ancha loma entre Punta Gabaro y Pelopin esta recorrida por una pista, por lo que es muy cómoda de andar e ideal para raquetas de nieve.
Como he mencionado antes, corría una ligera brisa por el cordal, sino me achicharro por aquellos lares.
Una hora me costo recorrer toda la loma desde el Manchoya al Puerto de Yosa, y por aquí es donde me encontré a la única persona del día, un ciclista en sentido contrario al mio.
A las 15 horas estaba en el Puerto de Yosa, y el indicador me indicaba 1 horas y 25 minutos hasta Yosa, como los tiempos suelen estar puestos al alza, la brisa había parado, por lo que el calor apretaba y en esa zona no hay sombra, decidí castigar un poco más a mi estomago y obligarlo a comer el bocata como estaba planificado, en el abandonado pueblo de Yosa a las 16 horas junto al recuerdo y espíritu de sus antiguos moradores, que me obsequiaron con una placentero sesteo/descanso/contemplación/meditación hasta las 18 horas, justo para ajustar la llegada a Yosa a las 19 horas y a Zaragoza sobre las 21.
Al final lo tranquilo se me fue a una distancia y desnivel que mis piernas lo acusaron.