Pico Veleta desde Prado Llano.
near Sierra Nevada, Andalucía (España)
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Trail photos
Itinerary description
Fecha. 1 de enero de 2022.
Alpinismo, Invernal con más hielo que nieve.
Y era año nuevo, y había que empezar con buen pie aquí en Granada, y en mi soledad montañera se me ocurrió subir al Veleta, cumbre muy domesticada pero de vistas grandiosas, y en soledad no era cuestión de meterse en grandes empresas...
Así que a pesar de estar en pie a temprana hora, subí tranquilamente a la estación de Pradollano esperando que el hielo que me iba a encontrar estuviera más blandito, pues tenía en esta ocasión los crampones de aluminio que no tienen filos , ya que los de acero están afilándose...
El día anterior me dijo mi hermano que no dejaban aparcar en la Hoya de la Mora, así que dejé el coche en un hueco que pillé en el barrio alto de Prado LLano, y me encaramé calle arriba buscando llegar a la carretera.
Tive que subir alguna cusetecilla de tierra y saltar alguna valla, y muchas escaleras para llegar al aparcamiento del Peñón donde tenía que haber dejado el vehículo. Una vez allí para mi sorpresa no había manera de llegar a la carretera de la hoy, tenía que retroceder mucho por lo que opté por subirme por el terraplén, de esos que nos gustan tanto a los montañeros...
Carretera. y la sigo, llego al parking de la Hoya, vación de coches, aunque alguna carabana había, me queda la duda de si habría podido pasar para aparcar aquí, pero la aventura que traje para llegar me la hubiera ahorrado, y no me gustan ahorrar en aventuras.
Empiezo a subir, llego a la Virgen de las Nieves, esquivando algunas placas de hielo para no ponerme los crampones, que tengo que ponerme un poco más arriba, hay hielo por todas partes y en la pendiente que elijo por lo que debe de ser el camino más transitado de los muchos que suben al veleta.
Busco una senda en el hielo junto a la pista de esquí y en algún tramo nos metemosd por ella, sigo ascendiendo entre el hielo, llego a las posiciones del Veleta sin detenerme.
Desde la pista de nieve sigo una vereda de nieve que hay del paso de montañeros, se agradece pues fuera de ella es todo hielo, el piolet me da tranquilidad, me cruzo con un montañero que baja y me dice que se pisa bien, que el hielo es blando.
Me queda el último empujón, estoy echando de más la cena copiosa de anoche de nochevieja, menos mal que hoy vengo en ayuno y en ayuno seguiré hasta bajar del Veleta, es la mejor forma de limpiar los excesos que perturban tu cuerpo.
Me hundo en la nieve, y me alegro de que ya estoy casi arriba, donde dos "guiris" se han apropiado del geodésico para tomar su almuerzo ignorando las ganas de los que llegamos de fotografiarnos allí, toca esperar.
Me siento en una roca a contemplar el mar de nubes sobre el mediterráneo y estuve allí largo tiempo mientras pasaban por el geodésico muchos montañeros a los que me ofrecía a hacerles fotos, estoy tratando de quedarme sólo en mi cumbre de hoy, cuando por fin creo que lo eh conseguido aparece un Extremeño que se llama Juanjo, de Hornachos, cerca de donde yo vivo y comenzamos a charlar como si nos conociéramos de toda la vida, en poco aparecen Arturo y María de Valladolid y nos todos bajamos juntos, nos desviamos a la izzquierda para bajar por las pistas que se anda mejor y están cerradas sin esquiadores, bajamos disfrutando de las temperaturas atípicas que derriten la nieve, en la cumbre podría estar sin camiseta sin problema, esta "ola de calor" año nuevera es terrible...
Llegamos a la Hoya de la Mora y Juanjo nos invita a bajarnos hasta el coche, la pareja de Valladolid la tiene en la carretera a dos Kms de la Hoya de la Mora, a mi me dejan abajo y luego tengo que subir hasta el coche rodeando y subiendo todo Pradollano lo que me llevó casi una hora, así que la ruta se me alargó de más pero mereció la pena ver las calles abarrotadas de personas que llenaban los bares y las tiendas, lo que en plena pandemia omicron te llama la atención como sanitario pero al mismo tiempo agradeces que la vida continúe...
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Alpinismo, Invernal con más hielo que nieve.
Y era año nuevo, y había que empezar con buen pie aquí en Granada, y en mi soledad montañera se me ocurrió subir al Veleta, cumbre muy domesticada pero de vistas grandiosas, y en soledad no era cuestión de meterse en grandes empresas...
Así que a pesar de estar en pie a temprana hora, subí tranquilamente a la estación de Pradollano esperando que el hielo que me iba a encontrar estuviera más blandito, pues tenía en esta ocasión los crampones de aluminio que no tienen filos , ya que los de acero están afilándose...
El día anterior me dijo mi hermano que no dejaban aparcar en la Hoya de la Mora, así que dejé el coche en un hueco que pillé en el barrio alto de Prado LLano, y me encaramé calle arriba buscando llegar a la carretera.
Tive que subir alguna cusetecilla de tierra y saltar alguna valla, y muchas escaleras para llegar al aparcamiento del Peñón donde tenía que haber dejado el vehículo. Una vez allí para mi sorpresa no había manera de llegar a la carretera de la hoy, tenía que retroceder mucho por lo que opté por subirme por el terraplén, de esos que nos gustan tanto a los montañeros...
Carretera. y la sigo, llego al parking de la Hoya, vación de coches, aunque alguna carabana había, me queda la duda de si habría podido pasar para aparcar aquí, pero la aventura que traje para llegar me la hubiera ahorrado, y no me gustan ahorrar en aventuras.
Empiezo a subir, llego a la Virgen de las Nieves, esquivando algunas placas de hielo para no ponerme los crampones, que tengo que ponerme un poco más arriba, hay hielo por todas partes y en la pendiente que elijo por lo que debe de ser el camino más transitado de los muchos que suben al veleta.
Busco una senda en el hielo junto a la pista de esquí y en algún tramo nos metemosd por ella, sigo ascendiendo entre el hielo, llego a las posiciones del Veleta sin detenerme.
Desde la pista de nieve sigo una vereda de nieve que hay del paso de montañeros, se agradece pues fuera de ella es todo hielo, el piolet me da tranquilidad, me cruzo con un montañero que baja y me dice que se pisa bien, que el hielo es blando.
Me queda el último empujón, estoy echando de más la cena copiosa de anoche de nochevieja, menos mal que hoy vengo en ayuno y en ayuno seguiré hasta bajar del Veleta, es la mejor forma de limpiar los excesos que perturban tu cuerpo.
Me hundo en la nieve, y me alegro de que ya estoy casi arriba, donde dos "guiris" se han apropiado del geodésico para tomar su almuerzo ignorando las ganas de los que llegamos de fotografiarnos allí, toca esperar.
Me siento en una roca a contemplar el mar de nubes sobre el mediterráneo y estuve allí largo tiempo mientras pasaban por el geodésico muchos montañeros a los que me ofrecía a hacerles fotos, estoy tratando de quedarme sólo en mi cumbre de hoy, cuando por fin creo que lo eh conseguido aparece un Extremeño que se llama Juanjo, de Hornachos, cerca de donde yo vivo y comenzamos a charlar como si nos conociéramos de toda la vida, en poco aparecen Arturo y María de Valladolid y nos todos bajamos juntos, nos desviamos a la izzquierda para bajar por las pistas que se anda mejor y están cerradas sin esquiadores, bajamos disfrutando de las temperaturas atípicas que derriten la nieve, en la cumbre podría estar sin camiseta sin problema, esta "ola de calor" año nuevera es terrible...
Llegamos a la Hoya de la Mora y Juanjo nos invita a bajarnos hasta el coche, la pareja de Valladolid la tiene en la carretera a dos Kms de la Hoya de la Mora, a mi me dejan abajo y luego tengo que subir hasta el coche rodeando y subiendo todo Pradollano lo que me llevó casi una hora, así que la ruta se me alargó de más pero mereció la pena ver las calles abarrotadas de personas que llenaban los bares y las tiendas, lo que en plena pandemia omicron te llama la atención como sanitario pero al mismo tiempo agradeces que la vida continúe...
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