Picos Mondinero ó Montidinera 1467 m. y Fragineto 1749 m. circular desde La Tejería

Actividad de alpinismo en la sierra de Guara que nos permitirá conocer y recorrer una de las partes más atractivas de éste enorme Parque Natural

Si bien la calificación como actividad de alpinismo se puede considerar fácil, el terreno de roca caliza está bastante fracturado, con muchas rocas esquistadas, piedra suelta y tramos de senda vestidos de arbustos duros. Conviene recomendar la máxima atención en esta larga circular, es decir moverse con la suficiente cautela para no sufrir percances. En general , ya que la ruta es bastante larga y produce un cierto cansancio.

Es importante tener en cuenta que en todo el alto de la cresta y hasta casi el fondo del valle no vamos a tener agua, por tanto mucho cuidado en época calurosa porque puede hacernos mucha falta.

Ruta realizada a un ritmo alto, lo habitual suele ser una o dos horas más con las mínimas paradas.

ACCESO:

Para llegar al inicio de la ruta desde Monzón, tomaremos la A-22 hasta la salida 89 Liesa / Ibieca, atravesamos la antigua n-240 y continuamos por la carretera HU-V 3311, pasamos las travesías de Liesa e Ibieca, más adelante llegaremos a la localidad de Aguas (unos metros antes del casco urbano), en la intersección giramos a la izquierda (dirección Huesca) y enseguida a la derecha por la carretera que lleva a la Presa de Guara.
Siguiendo la carretera ó camino asfaltado nos encontraremos con una rotonda con la indicación “Presa de Guara” y “San Cosme”.
Continuamos ahora por pista de tierra que seguimos durante unos 4 km hasta una zona de estacionamiento autorizado llamado la Tejería.
A mitad de camino os encontraréis varias señales de barrera a 50 m. y una señal de no aparcar en todo el término de San Cosme que puede inducir a error: no dejéis el coche ahí donde la señal, pues el estacionamiento autorizado de la Tejería está más adelante.

DESCRIPCION DE LA RUTA:

Desde La Tejería comenzamos a andar sobrepasando la barrera que prohíbe el paso a vehículos no autorizados, dirección Norte. Es una finca privada y a su vez explotación privada de caza.
A los pocos cientos de metros llegaremos al entronque con un camino que por la derecha se dirige al embalse de Vadiello. Lo obviamos y seguimos recto.

En poco tiempo estaremos sobre una loma donde los árboles han sido podados a modo de dehesa, es el llamado "Llano de La Carrasca". Tomamos en la nueva intersección el camino señalizado como "Nocito" "Ermita de Fabana".

Seguimos el camino que empieza a descender, enseguida un mojón de piedras marca el inicio de la senda que parte a la izquierda, se adivina el pico Montidinera entre dos grandes moles de roca muy vistosas y bonitas, especialmente la gran mole de la derecha completamente surcada por efecto de la erosión, llamada "El Pito"que es una zona de escalada.

Continuamos por el barranco sobrepasando una gran roca redondeada que también tiene nombre, "El Bolo". Debajo de él, hay un espacio para vivaquear.

Desde el bolo comienza la verdadera ascensión, podemos subir tieso para arriba por la barranquera llena de pedreras que sería la subida directa, un poco más arriba encontraríamos una cuerda para facilitar un paso de trepada. En nuestro caso decidimos atravesar la primera parte de pedrera desviando a la izquierda en busca de la muralla pétrea, pasando pegados a la base y progresando bien. De esta forma hacemos un recorrido un poco más largo y teóricamente más suave si bien, por haberlo hecho de las dos formas, no hay excesiva diferencia entre ambas alternativas.

Superada la zona de pedreras, seguimos ascendiendo siempre por pendiente fuerte ganando la pirámide final que es rocosa con bastantes arbustos pequeños, finalmente tras sólo 1 hora 20 minutos alcanzamos la cima del pico Mondinero ó Montidinera (menudo lío con los nombres, hay otras cimas con nombres similares en otras zonas del Pirineo: Pala Montinier, Pueyo Mondicieto, Mondoto, Mondiciero...)

Nos hacemos una foto y como es muy buena hora decidimos continuar al pico Fragineto.

Para subir a esta segunda cima, debemos bajar al collado del Fragineto ó Cuello Lizana, que es un nombre para mí más apropiado.

El descenso desde el principio ya promete, pues comenzamos enseguida a destrepar.

Encontraremos la senda muy vestida, arbustos muy duros de boj principalmente. Es muy estrecha y desciende un poco a lo bestia, esto es Guara en estado puro, un mundo de sensaciones de lo agreste, salvaje y solitario. "No apto a pisahierbas" (domingueros).

Pasaremos tres destrepes, el segundo está equipado con una cuerda estática en muy buen estado con varios nudos que facilita la bajada aunque sin cuerda también se puede descender.
Pasado el tercer punto conflictivo descendemos una pequeña pedrera y por la derecha de ésta tomamos la senda ya sin apenas desnivel, que va llaneando hacia el Cuello Lizana, es un tramo muy chulo.

El collado es en sí una pequeña pradera con vistas donde uno se quedaría allí relajado si no fuera por la que nos espera.

Iniciamos la ascensión al pico Fragineto por un senderito limpio y hermoso, bajo algunos robles centenarios.

Enseguida la senda se encarama a las rocas de caliza, a media ladera pero cada vez más directa, hasta ganar la cresta. Es ancha y no tiene pasos técnicos relevantes, así que simplemente es una cresta para disfrutar.

A medida que ascendemos, mejora el panorama. Destaca al Oeste la imagen del pico Borón, una cima modesta pero rodeada de enormes paredes de caliza verticales, es una montaña que he subido bastantes veces y que siempre me ha permitido disfrutar.

Seguimos la cresta a veces un poco estrecha pero cómoda, hasta conseguir la cima del Fragineto. Sus 1749 m. de altitud dan unas panorámicas increíbles de todo el valle, especialmente de la cima del tozal de Guara y al norte el Gabardiella.

Receso mínimo y continuamos la alargada cresta ahora hacia el nordeste, descendiendo suavemente hasta la punta donde se sitúa el pico Corcurezo.

Hacemos cima, regresamos 50 metros atrás para tomar un sendero, giro de 90º hacia el collado de Petreñales, divisoria natural con el Tozal de guara al Sureste del Corcurezo.

Una vez en el collado de Petreñales, tomaremos la muy amplia y bien señalizada senda que desciende al suroeste, atravesando un fabuloso bosque de pinar y otras especies arbóreas.
Éste tramo de senda tan buena se debe a que es el de la subida al Tozal de Guara desde La Tejería, la cual se beneficia de un mantenimiento periódico debido a su importancia. Descender por este amplio caminito carece de complicaciones exceptuando el paso por los estrechos del río Calcón, donde hay que hacer malabarismos para no mojarse los pies y que en época de crecidas sería casi imposible evitar descalzarse.

Justo antes del paso por los estrechos, encontraremos la señal que indica el enlace entre ésta senda y la que baja desde el cuello Lizana, entre el Montidinera y el Fragineto.

Pasados los estrechos del Calcón la senda se convierte en camino que cómodamente nos conducirá hasta la Ermita de Fabana. A partir de esta construcción en semi - ruina, volvemos a un sendero muy hermoso entre el pinar que, suavemente y en ligero ascenso, nos dejará en el cruce de La Tejería donde estacionamos nuestros coches.