Por las dolinas de Itxina en busca de Nataliatx
near Urigoiti, País Vasco (España)
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Itinerary description
Ruta complicada y peligrosa. Solo para montañeros curtidos.
Pasa por las oquedades más conocidas de Itxina, por Axkorrigan y por las 4 dolinas que custodian la mítica peña Nataliatx. No estoy seguro de que sea ésta pero coincide con la descripción conocida.
Según refiere Julio Caro Baroja en la recopilación de leyendas de su obra Las falsificaciones de la Historia:
"Uno de los relatos apócrifos que tuve a bien escuchar sitúa a la princesa rusa Natalia Romanova en Euskadi, en busca de algún poder sobrenatural que redimiera a su padre, Zar de todas las Rusias, quien habiendo contraído una enfermedad de origen idiopático, resolvió enviar a su numerosa prole por todo el ancho mundo para encontrar un remedio a su mal.
La princesa Natalia recabó información y resolvió interceder ante Mari, la más poderosa de las divinidades vascas. Acudió a Arrazola para subir a la morada de la Diosa pero allí se acongojó ante la monumental tapia vertical de la pirámide del Anboto. Afortunadamente un lugareño le indicó que los dominios de Mari se extendían hasta Itxina, a una cueva principal denominada Supelegor y allí acudió, inocente, con su ofrenda: vodka y caviar de beluga.
Ya en Itxina, entró por Kargaleku y al traspasar las campas de Lexardi se perdió y deambuló con su séquito dos semanas por el karst de Itxina.
La travesía fue penosa y las alimañas del bosque y la sed diezmaron a su comitiva y los supervivientes fueron engullidos por simas y despeñándose por los cortados, que no se vislumbraban por una niebla, que - de lo espesa- sentíase como gelatinosa.
Cuando se quedó sola, tuvo la fortuna de encontrar a Aideko - el numen sobrenatural responsable de las enfermedades cuyas causas se desconocen y creador de nieblas fantasmagóricas- en una peña rodeada de cuatro dolinas gigantescas en el centro del peñascal y desde donde se atisbaba la inmensidad de Itxina, con las cuatro esquinas del mundo: Altipitatx, Gorosteta, Lekanda y Axkorrigan.
Aideko engañó a Natalia para que depositará el vodka y el caviar en la peña desde la que vigilaba Itxina - atalaya privilegiada del lugar- diciéndole que Mari acudía allí a controlar sus dominios.
También la ayudó a salir del laberinto pétreo, no sin antes advertirla de que debía repetir el agasajo para mantener sus efectos.
Comoquiera que la salud del Zar mejoró, fuera por la intervención de Aideko o cualquier otra causa, la princesa repitió las visitas con los manjares durante años y años y desde entonces al lugar se le denomina Nataliatx, formado por el morfema atx (peña) unido al nombre de la princesa."
Pasa por las oquedades más conocidas de Itxina, por Axkorrigan y por las 4 dolinas que custodian la mítica peña Nataliatx. No estoy seguro de que sea ésta pero coincide con la descripción conocida.
Según refiere Julio Caro Baroja en la recopilación de leyendas de su obra Las falsificaciones de la Historia:
"Uno de los relatos apócrifos que tuve a bien escuchar sitúa a la princesa rusa Natalia Romanova en Euskadi, en busca de algún poder sobrenatural que redimiera a su padre, Zar de todas las Rusias, quien habiendo contraído una enfermedad de origen idiopático, resolvió enviar a su numerosa prole por todo el ancho mundo para encontrar un remedio a su mal.
La princesa Natalia recabó información y resolvió interceder ante Mari, la más poderosa de las divinidades vascas. Acudió a Arrazola para subir a la morada de la Diosa pero allí se acongojó ante la monumental tapia vertical de la pirámide del Anboto. Afortunadamente un lugareño le indicó que los dominios de Mari se extendían hasta Itxina, a una cueva principal denominada Supelegor y allí acudió, inocente, con su ofrenda: vodka y caviar de beluga.
Ya en Itxina, entró por Kargaleku y al traspasar las campas de Lexardi se perdió y deambuló con su séquito dos semanas por el karst de Itxina.
La travesía fue penosa y las alimañas del bosque y la sed diezmaron a su comitiva y los supervivientes fueron engullidos por simas y despeñándose por los cortados, que no se vislumbraban por una niebla, que - de lo espesa- sentíase como gelatinosa.
Cuando se quedó sola, tuvo la fortuna de encontrar a Aideko - el numen sobrenatural responsable de las enfermedades cuyas causas se desconocen y creador de nieblas fantasmagóricas- en una peña rodeada de cuatro dolinas gigantescas en el centro del peñascal y desde donde se atisbaba la inmensidad de Itxina, con las cuatro esquinas del mundo: Altipitatx, Gorosteta, Lekanda y Axkorrigan.
Aideko engañó a Natalia para que depositará el vodka y el caviar en la peña desde la que vigilaba Itxina - atalaya privilegiada del lugar- diciéndole que Mari acudía allí a controlar sus dominios.
También la ayudó a salir del laberinto pétreo, no sin antes advertirla de que debía repetir el agasajo para mantener sus efectos.
Comoquiera que la salud del Zar mejoró, fuera por la intervención de Aideko o cualquier otra causa, la princesa repitió las visitas con los manjares durante años y años y desde entonces al lugar se le denomina Nataliatx, formado por el morfema atx (peña) unido al nombre de la princesa."
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