PUERTO DE TORNAVACAS - CALVITERO Y TORREÓN - TORNAVACAS

Tiempo en movimiento: 8 h y 20'.

Para ir de Tornavacas al puerto en vehículo tras la caminata yo disponía de dos opciones que acabaron sin cuajar, así que como se me hizo de noche opté por transitar por la carretera. De esta guisa el desnivel positivo acabó igualándose con el negativo, superando así los 1600 metros. Ya en el puerto vi que parten de él hacia el pueblo dos senderos señalizados, uno de 7 kilómetros y pico y otro de tres y pico. Si vais solos, como yo, y no disponéis de medios para completar el círculo, es aconsejable estudiar esos dos senderos para evitar el postrer asfalto. Dicho esto paso a describir el recorrido subido a la página:

Parte del puerto un camino hacia la Sierra de Béjar que se adentra en un robledo tras pasar una casa en ruinas.

Quedando atrás el bosque el camino está flanqueado por una portilla que cruzamos. Justo tras ello tomamos a la derecha un camino secundario que se diluye a veces y que acabamos abandonando al descubrir unos hitos sobre un peñasco. Aquí hay que hacer un inciso: Por favor, no pongáis hitos allí donde no estéis seguros de ser la mejor opción. Aquí, por ejemplo, descubrí, para mi indignación, que había multiplicidad de opciones a seguir, así que opté por obviar toda señal humana y avanzar zigzagueando por instinto. En cierto momento seguí brevemente una vereda que acabé por abandonar pues no ascendía, sino que continuaba faldeando.

De esa guisa se llega a la cuerda muy cerca del Risco La Campana, que yo no encumbré por ahorrar energías para lo que aún restaba, que era exigente.

A partir de aquí tenemos un tramo de descenso hacia un collado y hay que esquivar piornos con paciencia. Ya desde arriba podemos estudiar el trayecto tras el collado para trazar por calveros, como acabó siendo mi caso.

Para mi grata sorpresa la multiplicidad de hitos desciende en esta zona, y recuperada la cuerda desparece del todo, algo extraordinariamente esencial en el tramo siguiente, el emocionante tramo de crestería que vamos a afrontar. Gracias a la colocación de precisos hitos aquí yo sólo tuve un paso aéreo sin apenas dificultad, y las continuas y divertidas trepadas fueron bastante asequibles. Ante cualquier duda buscad siempre el mojón de piedras, él os aliviará sobremanera el paso.

Pasado lo más complicado de la arista nos dirigimos a encumbrar el Calvitero y el Torreón, no sin antes detrepar por una paso con cadena sin complicaciones.

Toca, tras un receso merecido, afrontar el largo y duro descenso. Hay unos hitos que yo deseché en un principio. Llegamos pronto a la zona de Lagunas del Torreón, que yo hallé secas. A ellas llega un sendero, muy difuso a veces, que acabé descubriendo. Aquí sí que los hitos marcan el camino correcto. Perdí la senda alguna que otra vez recuperándola parra llegar a la Cueva de Santiago León, refugio de antiguo guerrillero. Ya la senda es muy evidente y, poco más allá, desemboca en un camino junto a un cercado.

El camino pasa a ser de hormigón al traspasar una portilla. Ya casi al final tenemos un pequeño tramo de senda, otro de camino y abocamos a la carretera en el pueblo de Tornavacas, unos 400 metros más abajo del puerto del mismo nombre