Toronzué 2264 m. desde el túnel de Cotefablo

La ascensión al pico Toronzué podría considerarse como senderismo si no fuese por las fuertes pendientes de sus laderas, que tanto al ascender como en la bajada suponen un gran esfuerzo y obligan a tener cuidado en dicho descenso por el peligro de torceduras.

Esta montaña es bastante frecuentada en invierno ya que suele quedar bastante innivada, pero son dichas pendientes precisamente las que le dan un carácter alpino.

DESCRIPCION DE LA RUTA:

Comenzamos en el amplio estacionamiento ubicado junto al túnel de Cotefablo en su punta Este (vertiente del valle del Ara - Broto).

En la margen izquierda y junto a unos silos de acumulación de sal, se localiza una senda que pasa justo por encima de la boca del túnel, continua ascendiendo y tras cruzar un camino se encarama hasta la loma superior de dicho paso carretero.

Situados en la parte superior seguimos el camino por la derecha, hacia el Nordeste.

La pista llanea hasta el puerto de Cotefablo, punto en el que bordea el monte Gabardos por su cara Este y de nuevo regresa al cordal en el collado de Gabardos.

A partir de este punto empieza la verdadera ascensión.
Atacamos la arista del Monte Torcedor, ancha y algo boscosa en su base. A continuación y justo donde las pendientes se acentúan salimos a una extensa pradera de hierba en forma de montículos que dificulta en algunas partes la progresión, tónica generalizada hasta la cima del Toronzué.

Lo que queda desde el Monte Torcedor es la bajada a un collado, desde el cual se asciende al Tozal de Las Planas y luego de volver a bajar a otro colladito ascender la exigente y larga pendiente final hasta la cumbre del Pico Toronzué, desde el cual las vistas hacia el Macizo de Tendeñera son impresionantes.

En resumen una montaña que debido a esa sucesión de collados te rompe algo el ritmo pero que se sube bien si se toma uno la ruta con paciencia. Y cuyas panorámicas son muy buenas, al estilo del Bachesango y Monte Sarasé en la misma zona.