Travesía de Alta Montaña al Mulhacen y Trevelez
near Sierra Nevada, Andalucía (España)
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Itinerary description
Magnifica travesía de alta Montaña realizada los días, uno y dos de Agosto, por zonas abruptas del macizo de Sierra Nevada, donde la altitud alcanza la máxima expresión en la Cima del grandioso rey de la Península Ibérica. ¡¡¡El MULHACEN!!!.
Damos inicio a esta excitante aventura, partiendo desde la Hoya de La Mora, adentrándonos en el barranco de San Juan, por la Hoya del Moro y las grandes praderas de borreguiles hacia los Tajos del Campanario y tomar el Veredon inferior que nos dejará en el gran Circo de los corrales del Veleta, en las Trancadas del Guarnon, de cuyos manantiales cubiertos de borreguiles, forman el Río Guarnon.
Cuando coronamos los Tajos del Campanario, la visión de las grandes cumbres de los tresmiles, Veleta, Los Machos, Mulhacen, Alcazaba, Vacares, transmiten unas estampas Alpinas de excepcional belleza. La verticalidad y desnudez de las mismas, hacen ver lo insignificantes e inanes que somos con estos gigantes de la montaña.
Después de recorrer con la mirada el recorrido a seguir, y repuestos de las imágenes sobrecogedoras de estas moles, la vista se detiene en el Collado de Venta Grande, en la Loma del Lanchar. Visto desde aquí, lo primero que piensas: ¿por ahí se puede subir?.....
En la Arista de los Tajos del Campanario, en lo que al principio parece que no hay camino para bajar, por medio de unos hitos de piedras, nos marca la senda a seguir. Esta en diagonal, va pegada a las paredes casi verticales de los Tajos, buscando sinuosamente los resaltes que la pared ofrece, para salvar el gran desnivel existente. Mientras bajamos, no percibimos las zonas expuestas y voladas de estos murallones, pero una vez en las Trancadas del Guarnon, giramos la vista al Norte, y no se percibe ningún camino ni senda, entonces...¡¡¡¿por donde hemos bajado?!!!... parece un misterio, como si ese Vasar que nos ha permitido superar estos tajales, hubiese desaparecido.
En las Trancadas del Guarnon, un gran rebaño de ovejas, pastan en las praderas de borreguiles, alimentados por Neveros, veneros y chorreras que los mantienen frescos, jugosos y aún verdes.
Coronado, no sin gran esfuerzo el Collado de Veta Grande en la gran Loma del Lanchar, nuevamente la visión de las grandes cumbres, saltan a la vista, y cuanto más cerca se ven, más imponen. La visión de la Laguna Larga en una plataforma del terreno entre los Crestones de Río Seco, y Puntal de la Caldera, es llamativa.
Bajando Veta Grande, entramos en otro gran Circo: Los Corrales del Valdeinfierno, amurallados por los Crestones de Río Seco, el Collado del Lobo, y el Puntal de La Caldera, donde se encuentran las Lagunas, Larga y Galbata, que dan origen al nacimiento del Río Valdeinfierno. La Larga tiene una peculiaridad: Aparentemente es una Laguna de aguas muertas...aparentemente, pero la realidad, es que el desagüe de la misma lo hace a través de la Laguna Galbata. Dos Lagunas separadas por un brazo de monte.
En la Galbata, reponemos fuerzas bajo las atentas miradas de las monteses, y sin pérdida de tiempo, dejamos atrás las Lagunas, en dirección a Juego Bolos, que conforme nos acercamos a la cumbre, parece que no tiene nada. Es otra apariencia errónea. Una vez en su Cumbre, en ella, el anfiteatro que se abre en el horizonte, es ¡¡¡¡estremecedor, indescriptible, sobrecogedor, embriagador!!!!... no hay palabras... La cara norte del Mulhacen, una pared de más de cuatrocientos metros de desnivel y la Laguna de La Mosca, o del Mulhacen a sus pies. Las Caras Norte y Oeste de la Alcazaba, con su interminable espolón, y su puntal del Goterón...el Puntal de Siete Lagunas, los Prados y Puntal de Vacares, en la lejanía, el veleta, Los Machos... una sucesión de cumbres que superan los tres mil metros de altura en un giro de visión de 180º....hay que estar ahí para entenderlo, y para vividlo. ¡¡Es maravilloso!!.
En la Laguna de La Mosca (se le llama así, porque vista cenitalmente desde la cumbre del Mulhacen, tiene forma de mosca) montamos el vivac para descansar y pasar noche el primer día, con vistas a la segunda jornada de la travesía.
Tras una noche aulladora y muy movida por Eolo, salvo las primeras horas, antes de salir la Luna, que nos permitió disfrutar de la visión de ver la Estación Espacial Internacional, orbitar el Globo Terráqueo, al igual que los satélites orbitan nuestro planeta, y los aviones de vuelos transoceánicos, vuelan hacia sus destinos en cualquier parte del mundo. Desmontamos el vivac, para acometer nuestra segunda jornada, con el reto más difícil de toda la travesía: coronar el Mulhacen por el canuto del Puntal de Siete Lagunas, y su Arista Este.
Desde la base de la Laguna, iniciamos la subida al Collado de Siete Lagunas por el canuto con fortísima pendiente por un terreno inestable y descompuesto, donde ascender cuesta un sacrificio enorme. Hay zonas, donde dar un paso hacia adelante, significa dar dos hacia atrás, ya que el terreno no se sujeta. Buscamos ascender lo más pegados a la pared, pues ahí la roca es segura. En nuestro lento ascenso, antes de coronar, a la derecha, sale la senda del Vasar del Mulhacen. Recorre toda la pared norte de Este a Oeste hasta salir próximo al Collado del Ciervo, o del Mulhacen. Tras penar y sufrir, coronamos el Collado que divide la Cañada de Siete Lagunas con el circo del Mulhacen. Ascendemos a la Cumbre próximo a su Arista Este. La ascensión es lenta y dificultosa al principio, pero una vez ganamos altura, la roca entera, solida y desnuda, nos facilita una ascensión progresiva y segura. Antes de llegar a la Cumbre, una brisa fresca y constante, nos dice que estamos llegando. Ya vemos el punto geodésico que corona la pequeña hornacina donde está situada la imagen de La Virgen. Gran cantidad de montañeros y personas de toda índole, disfrutan del lugar tan mayestático como la cima más alta del Rey de la Península Ibérica: ¡¡¡EL MULHACEN!!!.
El reto programado, se ha conseguido. Solo queda terminar la empresa, en una larga bajada hasta llegar a nuestro destino. Trevelez.
Descendemos del Mulhacen a Siete Lagunas por la Cañada del Borreguil hacia Laguna Hondera y las Chorreras Negras que son el desagüe de todas las Lagunas, dando origen al Río Culo Perro. Máximo aporte del río Trevelez, que junto a este, forman el Guadalfeo que desemboca entre Motril y Salobreña.
La bajada a Trevelez, es cansina, lenta y calurosa (es lo que tiene perder altura). Conforme avanzamos, pasada la Campiñuela, en la lejanía vemos el pueblo, que conforme avanzamos, lo vamos viendo por tramos, pero aunque lo veas, nunca llegas. Lo ves.. estás cerca, pero no terminas de llegar. No sé el porqué, pero así es.
Si algo tiene característico Trevelez, es el Plato Alpujarreño y el Jamón. Nada más entrar en el pueblo, su aroma inunda el ambiente y estimula la pituitaria por las fosas nasales, estimulando al estomago, ( que de por sí, ya viene estimulado) así, que....que mejor manera de darnos un merecido homenaje por la empresa realizada, que disfrutar de manjares tan ¡¡exquisitos y sabrosos!!.
Damos inicio a esta excitante aventura, partiendo desde la Hoya de La Mora, adentrándonos en el barranco de San Juan, por la Hoya del Moro y las grandes praderas de borreguiles hacia los Tajos del Campanario y tomar el Veredon inferior que nos dejará en el gran Circo de los corrales del Veleta, en las Trancadas del Guarnon, de cuyos manantiales cubiertos de borreguiles, forman el Río Guarnon.
Cuando coronamos los Tajos del Campanario, la visión de las grandes cumbres de los tresmiles, Veleta, Los Machos, Mulhacen, Alcazaba, Vacares, transmiten unas estampas Alpinas de excepcional belleza. La verticalidad y desnudez de las mismas, hacen ver lo insignificantes e inanes que somos con estos gigantes de la montaña.
Después de recorrer con la mirada el recorrido a seguir, y repuestos de las imágenes sobrecogedoras de estas moles, la vista se detiene en el Collado de Venta Grande, en la Loma del Lanchar. Visto desde aquí, lo primero que piensas: ¿por ahí se puede subir?.....
En la Arista de los Tajos del Campanario, en lo que al principio parece que no hay camino para bajar, por medio de unos hitos de piedras, nos marca la senda a seguir. Esta en diagonal, va pegada a las paredes casi verticales de los Tajos, buscando sinuosamente los resaltes que la pared ofrece, para salvar el gran desnivel existente. Mientras bajamos, no percibimos las zonas expuestas y voladas de estos murallones, pero una vez en las Trancadas del Guarnon, giramos la vista al Norte, y no se percibe ningún camino ni senda, entonces...¡¡¡¿por donde hemos bajado?!!!... parece un misterio, como si ese Vasar que nos ha permitido superar estos tajales, hubiese desaparecido.
En las Trancadas del Guarnon, un gran rebaño de ovejas, pastan en las praderas de borreguiles, alimentados por Neveros, veneros y chorreras que los mantienen frescos, jugosos y aún verdes.
Coronado, no sin gran esfuerzo el Collado de Veta Grande en la gran Loma del Lanchar, nuevamente la visión de las grandes cumbres, saltan a la vista, y cuanto más cerca se ven, más imponen. La visión de la Laguna Larga en una plataforma del terreno entre los Crestones de Río Seco, y Puntal de la Caldera, es llamativa.
Bajando Veta Grande, entramos en otro gran Circo: Los Corrales del Valdeinfierno, amurallados por los Crestones de Río Seco, el Collado del Lobo, y el Puntal de La Caldera, donde se encuentran las Lagunas, Larga y Galbata, que dan origen al nacimiento del Río Valdeinfierno. La Larga tiene una peculiaridad: Aparentemente es una Laguna de aguas muertas...aparentemente, pero la realidad, es que el desagüe de la misma lo hace a través de la Laguna Galbata. Dos Lagunas separadas por un brazo de monte.
En la Galbata, reponemos fuerzas bajo las atentas miradas de las monteses, y sin pérdida de tiempo, dejamos atrás las Lagunas, en dirección a Juego Bolos, que conforme nos acercamos a la cumbre, parece que no tiene nada. Es otra apariencia errónea. Una vez en su Cumbre, en ella, el anfiteatro que se abre en el horizonte, es ¡¡¡¡estremecedor, indescriptible, sobrecogedor, embriagador!!!!... no hay palabras... La cara norte del Mulhacen, una pared de más de cuatrocientos metros de desnivel y la Laguna de La Mosca, o del Mulhacen a sus pies. Las Caras Norte y Oeste de la Alcazaba, con su interminable espolón, y su puntal del Goterón...el Puntal de Siete Lagunas, los Prados y Puntal de Vacares, en la lejanía, el veleta, Los Machos... una sucesión de cumbres que superan los tres mil metros de altura en un giro de visión de 180º....hay que estar ahí para entenderlo, y para vividlo. ¡¡Es maravilloso!!.
En la Laguna de La Mosca (se le llama así, porque vista cenitalmente desde la cumbre del Mulhacen, tiene forma de mosca) montamos el vivac para descansar y pasar noche el primer día, con vistas a la segunda jornada de la travesía.
Tras una noche aulladora y muy movida por Eolo, salvo las primeras horas, antes de salir la Luna, que nos permitió disfrutar de la visión de ver la Estación Espacial Internacional, orbitar el Globo Terráqueo, al igual que los satélites orbitan nuestro planeta, y los aviones de vuelos transoceánicos, vuelan hacia sus destinos en cualquier parte del mundo. Desmontamos el vivac, para acometer nuestra segunda jornada, con el reto más difícil de toda la travesía: coronar el Mulhacen por el canuto del Puntal de Siete Lagunas, y su Arista Este.
Desde la base de la Laguna, iniciamos la subida al Collado de Siete Lagunas por el canuto con fortísima pendiente por un terreno inestable y descompuesto, donde ascender cuesta un sacrificio enorme. Hay zonas, donde dar un paso hacia adelante, significa dar dos hacia atrás, ya que el terreno no se sujeta. Buscamos ascender lo más pegados a la pared, pues ahí la roca es segura. En nuestro lento ascenso, antes de coronar, a la derecha, sale la senda del Vasar del Mulhacen. Recorre toda la pared norte de Este a Oeste hasta salir próximo al Collado del Ciervo, o del Mulhacen. Tras penar y sufrir, coronamos el Collado que divide la Cañada de Siete Lagunas con el circo del Mulhacen. Ascendemos a la Cumbre próximo a su Arista Este. La ascensión es lenta y dificultosa al principio, pero una vez ganamos altura, la roca entera, solida y desnuda, nos facilita una ascensión progresiva y segura. Antes de llegar a la Cumbre, una brisa fresca y constante, nos dice que estamos llegando. Ya vemos el punto geodésico que corona la pequeña hornacina donde está situada la imagen de La Virgen. Gran cantidad de montañeros y personas de toda índole, disfrutan del lugar tan mayestático como la cima más alta del Rey de la Península Ibérica: ¡¡¡EL MULHACEN!!!.
El reto programado, se ha conseguido. Solo queda terminar la empresa, en una larga bajada hasta llegar a nuestro destino. Trevelez.
Descendemos del Mulhacen a Siete Lagunas por la Cañada del Borreguil hacia Laguna Hondera y las Chorreras Negras que son el desagüe de todas las Lagunas, dando origen al Río Culo Perro. Máximo aporte del río Trevelez, que junto a este, forman el Guadalfeo que desemboca entre Motril y Salobreña.
La bajada a Trevelez, es cansina, lenta y calurosa (es lo que tiene perder altura). Conforme avanzamos, pasada la Campiñuela, en la lejanía vemos el pueblo, que conforme avanzamos, lo vamos viendo por tramos, pero aunque lo veas, nunca llegas. Lo ves.. estás cerca, pero no terminas de llegar. No sé el porqué, pero así es.
Si algo tiene característico Trevelez, es el Plato Alpujarreño y el Jamón. Nada más entrar en el pueblo, su aroma inunda el ambiente y estimula la pituitaria por las fosas nasales, estimulando al estomago, ( que de por sí, ya viene estimulado) así, que....que mejor manera de darnos un merecido homenaje por la empresa realizada, que disfrutar de manjares tan ¡¡exquisitos y sabrosos!!.
Waypoints
Waypoint
10,630 ft
Los Machos 3.327 msnm
River
9,367 ft
Chorreras Negras
Waypoint
6,171 ft
Mirador
Waypoint
10,574 ft
Canuto a Siete Lagunas
Waypoint
10,502 ft
Puntal de Siete Lagunas 3.316 msnm
Lake
9,137 ft
Laguna Galbata
Comments (4)
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Admirable Juan!!
Hola Paco LR!!
Tenemos el privilegio de disfrutar de un Parque Nacional y Natural, abrupto y de grandes contrastes. Además,... estando tan cercano, es pecado no visitarlo.
Un abrazo!!
Hola Juan.
Preciosas fotos y relato descriptivo de la hazaña, enhorabuena!!
Un abrazo
Hola Vilibiker!!
Nuestra Sierra Nevada, aunque "parda" en esta época, también es maravillosa.
Gracias por los comentarios.
Otro grande para ti.