Travesía Pirenaica con cumbres por el Pirineo Aragonés Central (Panticosa-Torla)

Exigente y dura travesía por el Pirineo Aragonés Central, pero a su vez espectacular y por entornos de una belleza extrema. Diseñada estudiando los mapas, senderos y cumbres que había en el entorno Panticosa-Torla. Dividida en 11 días se apoya en los refugios de la zona para que el día de ataque a cumbre, se haga con lo imprescindible, dejando peso en los refugios. Ascensos que en muchos casos requieren trepadas, no muy complicadas pero sí expuestas por terreno en ocasiones descompuesto e inestable. Solo recomendada para montañeros conocedores de este entorno y con mucha experiencia. Hay zonas donde un simple descuido o resbalón conllevan un accidente grave (por ejemplo en el descenso desde los Infiernos a la base del Arnales para evitar la brecha que habría que rapelar, a pesar de haber un itinerario con hitos, este es muy muy expuesto y peligroso y me llevó más de una hora poder salir de allí evitando una casi segura caída (en este mes de agosto ha habido dos accidentes mortales en este punto)
En cuanto al material no es necesario arnés y cuerda, pero sí casco por la inestabilidad del terreno (caída de piedras), crampones y piolet (a pesar de ser agosto el glaciar del Vignemale es perpetuo y la zona de Monte Perdido aún tenía nieve)
A grandes rasgos:
Día 1: Cresta Garmo Negro-Algas-Argualas desde Ref casa de Piedra (solo entraña dificultad en el tramo Algas-Argualas sobre todo por el terreno expuesto y descompuesto)
Día 2: Cresta Infiernos-Arnales (conexión Ref Casa de Piedra-Ref de Bachimaña; subida por Ibones Azules y collado de Tebarray y descenso por el collado de Pondiellos al Ref de Bachimaña). La cresta para ganar los Infiernos es expuesta pero con buenos agarres. El temido paso de la Marmolera es más ancho de lo que se pueda pensar, eso sí extremar precauciones si estuviera mojado o húmedo. Como se ha comentado el descenso desde los Infiernos a la base del Arnales por el flanqueo sur para evitar el rapel de la cresta muy muy peligroso. No lo recomendaría, reitero que este mes este punto ha ocasionado dos accidentes mortales. Mejor llevar material y hacer el rápel de la cresta.
Día 3: Gran Facha. Desde el Ref de Bachimaña nos dirigimos a los Ibones Azules y antes de estos, tomamos el desvío que por sendero cómodo asciende al Puerto de Marcadau que da paso a Francia. Desde allí abandonamos el camino principal y contorneamos hacia el noroeste buscando el collado de la Facha. Desde allí subimos a la Gran Facha por terreno en ocasiones de trepada pero fácil. Regresamos al collado y seguimos el sendero que por tierras francesas nos conduce al bonito entorno donde se encuentra el Ref de Wallon.
Día 4: Tras la tres primeras exigentes jornadas, por fin un día para el disfrute de los sentidos. Descendemos el valle de Marcadau hasta Pont de Espagne acompañados por el río y el bosque. Desde Pont de Espagne remontamos el espectacular y bello valle de Gaube, en peregrinación hasta el idílico lago de igual nombre. Con menos compañía, aunque aún importante en número seguimos remontando el valle mientras va apareciendo en el horizonte la espectacular silueta de la cara norte del Vignemale y su inconfundible Couloir de Gaube, hasta llegar al excelente mirador que es el Ref de Oulettes de Gaube.
Día 5: Ascenso al Vignemale. Como el refugio de Baysellance estaba repleto, tengo que afrontar la subida y el descenso desde el Ref de Oulettes de Gaube lo que supone casi 3 h 30 min más de marcha. Salgo a las 5 de la mañana porque dan tormentas por la tarde. En apenas 2 horas tras superar la Hourquette de Ossoue y rodear la cresta del Petit Vignemale, estoy poniéndome los crampones. El glaciar está estupendo sin aflorar grietas. En cómoda y trazada subida se llega a la base de la arista, donde se deja el material de nieve y se emprende una trepada por terreno muy descompuesto (llevar casco ya que es mucha gente la que nos podemos encontrar y hay caída continua de piedras) Como he llegado con buen horario, junto a un grupo de montañeros de Gerona realizo también el ascenso a los picos cercanos del Pic Clot de la Hount, Cerbillona y Pico Central. Desde el collado de Lady Lyster regresamos al glaciar y por el mismo camino de subida regreso al refugio Oulettes de Gaube.
Día 6: Otro día de transición y de conexión entre refugios y valles. Volvemos a España a través del puerto de los Mulos para llegar a Bujaruelo por el valle del Ara rodeados de montañas y parajes espectaculares.
Día 7: Ascenso al Pico Tendeñera. Sin ser un tresmil, se trata de una montaña espectacular y un recorrido por entorno solitario y apabullante sobre todo en su segunda mitad. Desde Bujaruelo remontamos el río Ara por poco tiempo para girar al oeste por el valle pastoril de Otal, remontando el circo del mismo nombre. Llega un punto donde abandono las marcas desteñidas de un tramo variante del GR 11 para ganar altura en diagonal por zona herbosa (recomiendo sin duda seguir las marcas aunque den mucha más vuelta y no lo que yo hice) en busca del collado de Tendeñera. A partir de aquí el terreno calizo se convierte en protagonista y la roca ya no nos deja de acompañar. Alcanzada la cumbre tras más de 5 horas, hay dos opciones, bien regresar por donde hemos subido o bien adentrarnos en un terreno kárstico con pocas señales e hitos donde la orientación sobre el terreno y un buen track por supuesto nos devolverá al valle de Bujaruelo por el barranco del Turbón. El paraje es espectacular pero a su vez inhóspito (no coincidí con nadie en todo el recorrido) y exige estar muy concentrado por lo quebradizo del terreno. Salimos al valle de Bujaruelo pero unos kilómetros por debajo de nuestro lugar de partida. Remontamos la pista del valle de Bujaruelo y en 3 km se llega al Refugio-Mesón de Bujaruelo.
Día 8: Ref de Bujaruelo-Ref Grange de Holle (Gavarnie): De nuevo hacia Francia, remontando 1000 metros de desnivel por la zona del Ibón de Bernatuara, precioso lugar y que aunque me exige más recorrido y esfuerzo, prefiero ya que el paso a Francia por el Puerto de Bujaruelo ya lo tengo bien trillado. Desciendo por terreno más suave hasta la Cabaña de Lourdes, donde enlazo con el GR-10 (sendero transpirenaico francés) que me conduce al Ref Grange de Holle en las cercanías de Gavarnie.
Día 9: Exigente etapa tanto en su desnivel, distancia y terreno a recorrer. Comienzo atravesando la población de Gavarnie por la pista que se dirige a la base de la Gran Cascada. Allí hay un paso conocido como las Echelles de Serradets que es la que elijo para alcanzar las cercanías de la Brecha de Roland. Es una zona de trepada fácil pero expuesta (evitar si está mojada) que en poca distancia supera una muralla de 600 metros de desnivel, con mayor exposición e inclinación en su primera mitad. Una vez superado este tramo ganamos vistas al Ref de Serradets (cerrado por obras, posiblemente abierto en 2019) Desde allí nos unimos a la peregrinación que sube la Brecha de Roland, donde tras reposar un rato y deleitarnos con las vistas a ambas vertientes de la frontera, giramos al oeste para alcanzar fácilmente la cumbre del Taillón. Volvemos a la Brecha y tras superar el paso de los Sarrios (expuesto pero con cadenas) descendemos a Góriz por terreno inestable de grandes rocas, pasando por la Gruta de Casterets (cerrada con cancela). Poco después de esta y en las cercanías de los Llanos de Millaris el sendero es más cómodo.
Día 10: Ascenso a Monte Perdido por la Punta de las Olas. Como la subida a Monte Perdido por su vía normal (Lago Helado y Escupidera) es una feria, decido tras consultar con los guardas del refugio subir por el itinerario de la Punta de las Olas (al final fui el único que acometió este recorrido, solo me encontré a dos personas que lo hacían pero a la inversa). A esta llego por el tramo del GR-11 que se dirige al Collado de Añisclo por las fajas superiores. La Punta de las Olas se alcanza fácil y bien. Después me dirijo al collado que da paso al Baudrimont SE, hay unos metros de trepada pero con cuidado se hace bien. Regreso a collado y remonto hacia la base de la canal que asciende al Pico Añisclo o Soum de Ramond. Aquí el terreno está muy descompuesto y la canal supone un paso para adelante y dos para atrás. Cansado consigo llegar a la cumbre de la más oriental de las Tres Sorores. El descenso es rápido y alcanzo el pequeño glaciar de Ramond. Se trata de algo más de un centenar de metros de desnivel que hay que remontar (crampones imprescindibles) hasta el cuello de Monte Perdido. Tras trepar unos metros alcanzamos su arista Este y por terreno fácil llegamos a la mítica cima con grandes vistas desde la misma. Descendemos por la ruta habitual. La Escupidera aún conserva nieve, pero por donde va la traza está limpia, aunque por una gravilla inestable. Una vez en el Lago Helado giramos dejando en frente nuestra al espectacular Cilindro de Marboré. Aún queda largo descenso a Góriz por terreno rocoso y zonas de piedra pulimentada debido al intenso trasiego de gente, donde hay que extremar cuidados, ya que lo más fácil es escurrirse y caerse por el estado de la misma.
Día 11: Noche terrible la que pasamos algun@s en el Refugio de Góriz debido a un virus o una intoxicación. No sabemos el qué, pero alrededor de 20-30 personas de las allí alojadas sufrimos un brote de vómitos y colitis que nos hace pasar una noche horrible. Tenía pensado volver a Torla por las Fajas de Fraucata y de las Flores, pero mi estado lo que me permite, es a duras penas bajar por el camino normal de Góriz a la Pradera de Ordesa, pasando por la Cola de Caballo, Gradas de Soaso y Bosque de las Hayas. En la Pradera de Ordesa la lanzadera me lleva a Torla donde pasaré la noche sin poder disfrutar del merecido homenaje gastronómico de fin de travesía, para regresar a Córdoba al día siguiente.
En definitiva una travesía en solitario (coincidiendo claro con gente en partes del recorrido y refugios) espectacular y exigente en la que pude cumplir todos los objetivos propuestos con el pequeño punto negro del virus o intoxicación la última noche.