VILLIMER-VILLANUEVA-VILLIMER

El objetivo era llegar a Villanueva del condado saliendo desde Villimer.
El primer intento (Sí, primer intento. Las cosas que salen bien a la primera parecen tener menos gracia) comienza siguiendo la carretera de Castrillo. Atravesamos Villimer y Castrillo y giramos a la izquierda al llegar al cruce de Villafruela. Continuamos recto y llegamos a un puente con bonitas vistas al río (las nubes que nos avisan de lo que va a pasar después tienen su encanto) y giramos a la derecha en el primer cruce que nos encontramos.
Atravesamos el pueblo de Villafruela y tomamos una carretera que nos lleva a San Cipriano. A la entrada tienen un guardián blanco que odia los patines. (Cuando un mastín se toma la molestia de levantarse para ladrar y correr a toda velocidad, quiere decir que probablemente te tengas que dar la vuelta).
Segunda alternativa:
Damos media vuelta y recorremos de nuevo la carretera, volvemos a atravesar Villafruela, pero esta vez mientras graniza (me gusta ver de todo), comemos almendras, y al llegar al cruce de Villafruela después del puente de las bonitas vistas al río con las nubes del encanto, cogemos la alternativa de seguir por la carretera que lleva a Cañizal. No tomamos el desvío a Cañizal, seguimos recto hasta que llegamos a San Vicente después de refugiarnos debajo de un plástico durante el gran diluvio. Continuamos hasta San Cipriano, lo atravesamos y finalmente llegamos a la carretera que nos lleva a Villanueva!
Para volver, cogemos la carretera general (carretera de Boñar) en San Cipriano, evitando de nuevo a los perros odia-patines, hasta llegar al cruce de entrada a Villafruela.
A partir de aquí, desandamos el camino hasta Villimer,..., lavamos los patines y nos secamos el pelo. Ruta seria.