Hayedo de Montejo-Cerron-Hayedo de Montejo

Salida desde el aparcamiento que hay en el centro de interpretación del Hayedo de Montejo sobre las diez y media de la mañana, con una buena nevada que estaba cayendo este día, nada mas cruzar el puente del río Jarama y que delimita las provincias de Madrid y Guadalajara, giramos a la izquierda por una buena pista que enseguida se bifurca en dos, cogeremos la de la derecha y llevaremos el río Ermito en la subida a nuestra izquierda, pasaremos por una serie de cabañas, la mayoría en ruina total (casa de Roman,Casa del Tío Agustin,Casa de los Gorrinos) y cruzaremos un par de puentes que si los pasamos en época de deshielo hay que tener cuidado ya que llevan bastante agua.

La subida hay momentos que pica para arriba en algunos tramos pero se hace llevadera, el día que realice la ruta me encontré nieve desde el mismo aparcamiento del Hayedo, sobre todo en la parte de arriba donde el sendero gira bruscamente a la derecha y por donde cae el agua del arroyo del Cibanal, justo en este punto me tuve que calzar las raquetas y ya no me las quite hasta la bajada.

No pude hacer la cima del Cerron debido al niebla tan espesa que había arriba y que no me permitía ver nada, incluso con el GPS me costo encontrar la bajada ya que a cada momento la pantalla se congelaba y tenia que estar quitándome los guantes para poder limpiarla, conseguí pegarme a la izquierda de una valla de espinos y poder bajar pegado a ella hasta que pude ver algo mas, después volví a seguir la señal del gps que bajaba monte a través en busca de la pista, la bajada la hice sin seguir el track del gps ya que había mucha nieve y fui buscando la mejor manera de bajar entre los arbole y las rocas, hasta llegar a la pista que coges hasta el final y que te saca al aparcamiento donde he dejado el coche.

Cuando llegue al arroyo del Cibanal, hubo media hora que la niebla despejo un poco y me dejo ver las impresionantes vistas que hay desde allí arriba, y aunque el día no acompaño lo suficiente ya que no dejo de nevar en todo el día y no me dejo hacer la cumbre del Cerron, solo por ese momento en que la niebla despejo, mereció la pena el subir hasta allí y estar rodeado de esas montañas nevadas y en el silencio mas absoluto.

La sierra de Ayllo y sus bosques nos pueden hacer disfrutar de un buen día de montaña, ya sea en plan invernal o cualquiera de las estaciones, ya sea pimaver-verano u otoño, esta ultima con el cambio de color en las hojas de los arboles.

P.D. esta ruta la he marcado como difícil por estar realizada en invierno y con mucha nieve y niebla, en verano será mucho mas fácil.