Ibones de Remuñé (raquetas de nieve)

Ruta a los ibones de Remuñé con raquetas de nieve.

Se trata de una ruta de raquetas algo técnica, si bien no tiene ningún paso que haga inviable la actividad en condiciones normales de nieve.

ACCESO:
La carretera A-139 Graus - Benasque continúa pasada esta localidad (km. 61) ascendiendo por el valle hasta el P.K. 71 donde la mayor parte de la circulación rodada continúa por el desvío de la derecha a los Llanos del Hospital.
En verano se puede continuar por la A-139 1,5 km. más hasta que la carretera finaliza bruscamente. Sin embardo en época invernal, al no tener mantenimiento este tramo apartado de la circulación, deberemos dejar el coche en la zona contigua a la intersección.

DESCRIPCION DE LA RUTA:
Accedemos al valle de Remuñe andando 1,6 km. por la carretera (algún tramo nevado ó helado). En el cartel indicativo ascendemos por la senda hacia un bosque de pinos, el recorrido es intrincado, deberemos prestar a tención a las "trampas" o puntos donde la nieve de repente se hunde y caes en un pequeño agujero.

Ya saliendo del bosque las pendientes son fuertes y hay que tomárselo con calma. Paso a paso se va progresando hasta alcanzar un alto con fabulosas vistas al valle nevado. Descendemos enseguida a la llamada "Pleta de Capellans" donde se cruza por un puente en verano, ahora con todo cubierto de nieve no se ve el puente y apenas tampoco el río.

En el centro del valle existe una prominencia rocosa muy destacable, debemos continuar nuestra ruta por la izquierda, entrando en una canal que en verano es un barranco, ahora hay tanta nieve que no se ve apenas ninguna roca. Toca sudar de lo lindo porque la pendiente es muy fuerte hasta el primer ibón (el más grande) de Remuñe.

Apenas se distingue el espacio ocupado por el lago, absolutamente cubierto de nieve. Disfrutamos de este paisaje tan distinto al veraniego y continuamos ascendiendo hasta llegar al ibón superior, más pequeño y también tapado por el blanco elemento.

Hacemos una larga parada para reponer fuerzas y comer un poco, luego seguimos el recorrido descendiente hasta un poco mas adelante, en que viramos a derecha para retomar la ruta por el centro del valle. Por pendientes de todos los tipos bajamos con relativa comodidad sobre el manto nivoso hasta la Pleta des Capellans, donde desandamos el recorrido ya realizado hasta el coche.

En general Remuñe es un valle absolutamente idílico para actividades invernales, teniendo presente que es propenso a avalanchas y por tanto deberemos estar muy bien informados sobre ese tema.

Destacar que solo encontramos un par de personas de travesía cuando ya estábamos llegando a la Pleta de Capellans, el resto del día solos y por nieve virgen.