Puerto de las Señales - Pico Remelende (1.888 m) - Mongayo (1.849 m) - Pico La Bardera (1.872 m) - Pico del Águila (1.848 m)

Cuando caen las primeras nieves sobre la Cordillera Cantábrica, uno de los lugares más espectáculares es el entorno del Puerto de las Señales. Zona muy agradable, de suaves desniveles, pocas complicaciones y con unas vistas de escándalo! Mañana que planeamos para conquistar todas las cumbres que aparecen hacia el norte, desde el Pico Remelende (1.888 m) hasta el Pico del Águila (1.848 m), pasando por gran parte de las cotas que forman la Sierra de Mongayo. Una jornada que promete!

INICIO:

La ruta se inicia en el Puerto de las Señales, uno de los puertos de mayor altitud de la provincia de León, a más de 1.600 m de altura. Llegamos por la parte leonesa, tras desviarnos en Puebla de Lillo. Accedemos relativamente pronto, así que no tenemos ningún problema en aparcar. Sin embargo, en época invernal, el espacio es sensiblemente menor, así que toca madrugar en fines de semana de gran afluencia.

DESCRIPCIÓN:

Antes de iniciar la ruta, tiempo para prepararnos. Todo parece indicar que la nieve estará muy dura, y que con el paso de las horas, se irá ablandando, sobre todo en caras soleadas. Como la inclinación nunca será un problema, nos calzamos las raquetas de nieve y llevamos el piolet por si acaso.

Tras visitar un cartel informativo casi tapado por la nieve, comenzamos a dar los primeros pasos de la ruta, rumbo a la cara sur del Pico Remelende, nuestro primer objetivo. Debemos hacerlo a lo largo de una loma entre pinos, desde la que ya iremos obteniendo una bonita panorámica.

A Sabri le cuesta un poco arrancar, y más cuando empieza a la sombra y pronto llega al sol. Entre frío y calor, vamos ganando los primeros metros de recorrido. Qué vistas hacia el Pico del Lago y el Macizo del Mampodre!

Superada la loma, llegamos a la canal de ascenso por la que llegaremos al cordal del Pico Remelende. Sin duda, esta será la parte más exigente de la ruta. Varios minutos de ascenso que nos harán sudar un poco más y que nos guiarán directamente al cordal del Pico Remelende.

El cordal del Pico Remelende será un tramo suave y sin grandes desniveles. No hay mucha nieve, pero la suficiente para ir pisando sobre blanco. Eso sí, está muy dura! Pronto vemos la cumbre del Pico Remelende, al fondo! Aunque aún tendremos que disfrutar de las tremendas vistas que se nos van abriendo, sobre todo hacia Picos de Europa, destacando Torre Santa, la montaña más alta y representativa del Macizo del Cornión.

Tras superar un último repecho, llegamos a la cumbre del Pico Remelende (1.888 m). Las vistas que tenemos desde aquí, a casi 1.900 m de altitud, son espectaculares! Picos de Europa, el Puerto de Tarna, Peña Ten, Peña Pileñes, el Macizo del Mampodre, la Sierra de Riaño, la Montaña Palentina, gran parte del Parque Regional Montaña de Riaño y Mampodre, las cercanas cotas que nos esperan, el Pico del Lago, etc. Es pronto y aún hace frío, así que tampoco estaremos mucho tiempo. Unos minutos de puro disfrute haciendo fotos y contemplando nuestro alrededor y seguimos!

Nuestro siguiente objetivo lo tenemos bastante cerca, el Pico Mongayo. Bajamos del Pico Remelende y llegamos al collado homónimo, el Collado Remelende. Bonitas vistas si miramos hacia atrás, comprobando cómo la gente va llegando a la cima del Pico Remelende, una de las cimas más conquistadas en esta época del año.

Sin grandes desniveles a superar, vamos remontando los pocos metros que tenemos por delante hasta llegar a la cumbre del Pico Mongayo (1.849 m). A las vistas ya obtenidas, añadimos la agreste cara norte de la Sierra de Mongayo y una buena panorámica hacia el Pico Tiatordos, Peña Maciédome y Redes, uno de los lugares más bonitos de Asturias! Coincidimos con una pareja asturiana que también disfrutaba de un gran día de nieve!

Descendemos del Pico Mongayo buscando la menor inclinación y viendo una especie de trinchera. Seguimos disfrutando de las bonitas vistas hacia el norte, incluso pudiendo contemplar el mar cantábrico! Llegamos al collado que nos separa del Pico Moneo, nuestro siguiente objetivo!

La ascensión vuelve a ser algo más exigente, aunque sólo serán unos pocos metros. En apenas unos minutos, llegamos al Pico Moneo (1.831 m). El Pico Moneo tiene dos cotas, ubicando su cumbre en la segunda. Nos llegan recuerdos de nuestro anterior paso por aquí, donde había mucha más nieve y apenas se percibía cuál de las dos cotas era más alta. No importa! Pasaremos por las dos! Seguimos disfrutando de un entorno espectacular!

Nuestro siguiente objetivo nos queda algo más lejos, aunque asequible y bastante a mano estando por aquí. Se trata del Pico La Bardera, hacia donde nos dirigimos. Descendemos unos pocos metros y llegamos al Collado de la Requexadina. Cómo estamos disfrutando de la nieve! Hacia el norte, el Parque Natural Redes, y hacia el sur, el Parque Regional Montaña de Riaño y Mampodre. Qué más se puede pedir!

Comenzamos el bonito ascenso hacia el Pico La Bardera. La subida no tiene ninguna complicación y siempre iremos recorriendo su bonita arista este. La arista no ofrece ninguna sensación aérea y siempre avanzará en suave ascenso y con unas vistas preciosas a ambos lados. Tan sólo el último tramo nos obligará a perder altura unos metros para volver a recuperarlos justo después.

Completada la preciosa arista este, llegamos al Pico La Bardera (1.872 m). La cumbre es un excelente mirador hacia el entorno del Puerto de San Isidro! Aparece el Pico Cascayón, el Canto del Oso, Peña del Viento, Peña Ausente, Peña Requejines, Peña Agujas, el Pico Toneo... Podemos nombrar un sinfín de montañas a nuestro alrededor! Varios minutos disfrutando de las vistas!

Para continuar la ruta, desandamos la arista este del Pico La Bardera, disfrutando nuevamente de su bonito trazado y de la espectacular panorámica hacia Picos de Europa! Sin duda, una de las partes más bonitas del recorrido!

Comenzamos el descenso hacia el Puerto de las Señales! Bajar por el Collado de la Requexadina no es buena idea, pues encontraremos mucha más inclinación y alguna cornisa algo más peligrosa. Por tanto, antes de llegar al citado collado, nos desviamos hacia la derecha para ir perdiendo altura por una loma mucho más suave. El descenso es muy tranquilo y no ofrece ninguna complicación técnica.

Pronto llegamos a la altura del Arroyo Los Carros, aunque se encuentra completamente nevado. Cambiamos de vertiente y comenzamos un pequeño ascenso que nos llevará hacia una especie de collado, dando vista a la zona por la que descenderemos hacia el Puerto de las Señales. Sabri decide descansar un rato, sentarse y disfrutar de las vistas que tenemos desde aquí. Tiempo para ascender a nuestra última montaña del día, el Pico del Águila.

La subida al Pico del Águila tampoco ofrece mayores complicaciones. Eso sí, el primer tramo nos volverá a exigir un poco más de esfuerzo, debiendo superar una de las zonas con más inclinación de la ruta. Tras el primer repecho, un suave paseo nos llevará hacia la cumbre, que ya la vemos a lo lejos.

Completada la subida, llegamos a la cima del Pico del Águila (1.848 m), una cumbre rocosa y desde la que obtenemos una bonita imagen del Puerto de las Señales, del Pico del Lago, del Pico Susarón y de Peña San Justo, otra de las cimas más emblemáticas de esta zona leonesa. Otro rato para disfrutar de las vistas, que la jornada se va acabando y hay que aprovechar!

Descendemos del Pico del Águila hasta unirnos nuevamente con Sabri, siempre por la misma vía de ascenso. Continuamos la ruta hacia el sur, hacia el Puerto de las Señales, bajando a lo largo de un valle algo más sinuoso y con mayor inclinación. La nieve ya se empieza a notar más paposa, encontrando muchos lugares soleados y con la nieve mucho más blanda. De pronto, Sabri empieza a practicar una de sus habilidades más notables cuando aparece la nieve, el culoesquí!

La última parte de la ruta nos obligará a cruzar el Arroyo de Zampuerna. El deshielo empieza a notarse y el agua corre por debajo, así que máxima precaución para no meter la pierna más allá de lo esperado! De nuevo entre pinos, seguimos perdiendo altura hacia el Puerto de las Señales.

Finalmente, tras completar el descenso, llegamos nuevamente al Puerto de las Señales, donde sólo nos resta quitarnos las raquetas de nieve y dar por concluida la ruta.

CONCLUSIÓN:

El Puerto de las Señales es un entorno fantástico para disfrutar de la nieve. Un terreno muy amable y sin grandes complicaciones, pero con unas vistas de ensueño! Ascendimos al Pico Remelende (1.888 m), al Pico Mongayo (1.849 m), al Pico Moneo (1.831 m), al Pico La Bardera (1.872 m) y al Pico del Águila (1.848 m), cinco cumbres desde las que podemos disfrutar de la Cordillera Cantábrica y de la montaña leonesa y asturiana. Una zona perfecta para disfrutar del esquí de montaña y de las raquetas de nieve! Muy recomendable!

MÁS INFORMACIÓN:

Puerto de las Señales - Pico Remelende (1.888 m) - Pico Mongayo (1.849 m) - Pico Moneo (1.831 m) - Pico La Bardera (1.872 m) - Pico del Águila (1.848 m)

Índice de Rutas
Mapa de Rutas
Mapa de Cumbres

Rubén Wanderlust (www.rubenwanderlust.com)