Puerto ventana- Vega de Socellares(Por pista ganadera a Ricabo)-Ermita Trobaniellu- Puerto Ventana (Ray2020)

Ruta ideal para realizar con raquetas, asequible para todo el mundo y que no precisa de una gran condición física.
Tras mucho tiempo si hacer ruta con raquetas, nos juntamos los amigos del Grupo de montaña GRUMAR de Piedras Blancas: Juan Manuel, Castaño, Emilio "Crowsbatle", Emilio Suárez, Pablo y quien esto escribe.
Salimos del alto del Puerto Ventana, sin sobrepasar el limite de Asturias; para caminar en tramo inicial durante 3 kms por la sencilla pista ganadera que conduce al pueblo de Ricabo.
Con el cielo cubierto y por momentos encapotado, íbamos ganado metros en agradable paseo con guapas vistas sobre el pico Ferreirúa cubierto por la nevada. Todo bien hasta llegar al km 3 de ruta, donde giramos a la derecha, justo donde un cartel indica desvío a Ronderos.
Allí la cosa cambió y empezamos a sufrir los azotes de una fuerte ventisca de nieve por momentos, muy desagradable y que nos impedía avanzar a veces. Así se inició la subida de la jornada a la Vega de Socellares, donde la nieve ya acumulaba por momentos un espesor más reseñable.
LLegamos a la collada de Cueñas Albas, bordeando por la derecha el pico Beiforco. Allí la ventisca había "desnudado" la collada en algunos momentos de la nieva caída, y comenzamos el descenso por la suave pendiente al corazón de la Vega de Socellares.

Por momentos nos hundíamos, por los importantes espesores de la nieve polvo caida, y en otras ocasiones pisábamos la hierba casi "desangrada" por la acción erosiva del viento.
LLegamos al seno de la vega inmersos en una enorme ventisca, que iba y venia y que obligó a Emilio Suarez a correr los 100 mts lisos tras un guante que literalmente volaba sobre la nieve... La Vega de Socellares es un lugar paradisiasco en verano y aún más bello en invierno, rodeado por un circo de montañas en los 360º. Antiguamente estaba cubierta por un gran lago y ahora en verano se pueden ver una serie de lagunas donde pasta el ganado plácidamente.
Hoy estuvimos poco tiempo alli y nos olvidamos de la idea de subir hacia el Pico de la Cueva de Melluque, por la canal de acceso a los Huertos del Diablo. El viento soplaba con enorme fuerza por momentos y nos llegó a tirar a alguno de nosotros, eso en el seno de la vega más protegida, así que imaginaros como debía soplar en las cumbres...
Dimos vuelta desandando los pasos y subiendo de nuevo al collao para bajar a la pista ganadera de Ricabo, y fuimos al encuentro de Emilio "Crowsbattle" y Juan Manuel que decidieron no subir por el viento a la vega y se habían dirigido a la ermita de Trobaniellu. LLegamos a la pista y arribamos a la ermita 1,2 kms después tras bordear el pico El Comal.
Allí aguardaban en la ermita los otros dos compañeros, aprovechamos los muros de la misma para resguardarnos de la ventisca y poder brinda así por el reencuentro, y en honor a nuestro compañero Badallo, (que en estos momentos está ingresado víctima del Covid).
Repuestas las fuerzas retornamos al puerto ventana, tomamos un camino alternativo que sale por la parte posterior de la ermita y discurre por una guapa vereda hasta enlazar de nuevo con la pista de Ricabo a la altura del Pico Comal.
El resto de la ruta fue volver de nuevo por la pista ganadera, aún con fuertes tramos de ventisca por momentos, pero según nos acercamos al puerto, el ultimo kilómetro y medio salio el sol y permitío guapas fotos del momento.
Al final casi 13 kms de sencilla ruta, la cual culminamos con una buena comida en Casa Manolo en Páramo, donde la fabada y el pote Tevergano están realmente buenos.