The silent route ampliada a 206 kms por carreteras anexas, en moto

La ruta "oficial" (63 kms) se debe a la iniciativa de los vecinos de las comarcas de Andorra Sierra de Arcos y Maestrazgo, en el año 2018. El trayecto discurre por la carretera A-1702, entre la Venta de la Pintada en Gargallo, y el Puerto de Cuarto Pelado, en Cantavieja. Se denominó The Silent Route, para atraer a turistas extranjeros.
Desde #gsmotoviajeros , hemos pensado que a los nacionales también debe atraernos esta ruta, y dado que es de tan solo 63 kms, para decidir ir pueden resultar excasos (en mi caso queda a más de 500 kms), por lo que hemos añadido 143 kms más, por carreteras anexas que parten de un cruce del recorrido oficial, que harán las delicias a los amantes de las curvas y paisajes de ensueño, que nos conectarán con la naturaleza. Y el recorrido pasa de 1 hora, aproximadamente, a 4 horas.

Estos kilometros tienen un explicación: se pueden recorrer llenando a tope nuestro depósito, prácticamente por cualquier moto, dado que en el recorrido no hay gasolineras.

¿Por qué se denomina ruta del silencio? Porque cuando cortas el motor es lo que se oye: silencio.
Iniciamos la ruta en la villa de Cantavieja, repleta de monumentos, historia y naturaleza. Sus calles tienen un trazado medieval que invita a callejear. En ellas transitaron Templarios, San Juanistas y Carlistas, lo que queda reflejado en edificios, historia, gastronomía, caminos y sendas. Recomendamos visitar: el Museo de las Guerras Carlistas, plaza porticada, interior de la torre, y Casa de Bayle. Salimos de Cantavieja en dirección al puerto de montaña Cuarto Pelado, donde se encuentra un cartel que indica el inicio de la ruta, fotografía que no puede faltar en nuestro álbum.

Seguimos la carretera y en el punto kilometrico 50, nos encontramos una area recreativa con la reproducción del autobús El Caimán, que desde 1930 hace la ruta entre Cantavieja y Alcorisa. Han colocado un poste para apoyar el teléfono móvil y poder hacer un selfie.

Seguimos la carretera y a lo lejos veremos un profundo barranco y unas casas colgando, estamos llegando al pueblo de Cañada de Benatanduz, al derecha vemos las afiladas paredes grises del Barranco de Benatanduz.En el pueblo viven solamente 50 habitantes, en otra hora orgullo de musulmanes y caballeros templarios que hicieron guardia entre las almenas de su castillo, hoy desaparecido. Es de interés la visita de sus calles, iglesia del SXIII y, ayuntamiento renacentista.

Seguimos el asfalto trazado como un sacacorchos hasta encontrar un cruce a la derecha con un indicador a Tronchón. Se trata de la primera ampliación de la ruta, por lo que no pertenece al recorrido oficial, pero nos gustaron sus 18 kms de curvas de todo tipo de trazada, que parece una enciclopedia de curvas. Al llegar a Tronchón daremos la vuelta por la misma carretera hasta el cruce, poco antes, a mano derecha, encontraremos una masía fortificada que sirvió de vigilancia del cruce de caminos, La Torre Gorgue.

En el cruce guiramos a la derecha y seguimos la carretera hasta Villarluengo, seguimos con el mismo recorrido: un montón de curvas como libros caídos de una estantería a lo largo de una carretera con elevaciones a ambos lados que no dejan que nuestros ojos descansen. El pueblo perteneció a la taifa de Benirasim. En 1170 Alfonso II lo conquista, después estuvo bajo la dirección de la Orden de los Hospitalarios de San Juan formando parte de la Baylia de Cantavieja. Durante las Guerras Carlistas, en el s. XIX, el general Cabrera estableció una academia de oficiales y una fábrica de fusiles. Por lo que podemos indagar en sus edificios su historia peculiar. Las casas están situadas en un espolón rocoso, sobre un profundo barranco de 200 metros de altitud en la confluencia de los ríos Palomita y Cañada. Dentro del pueblo está el “Balcón de los forasteros”, un mirador desde el que se disfruta de este impactante paisaje.

Seguimos la tortuosa carretera disfrutando del surfeo de curva a curva sin descanso, hasta encontrar un cruce a mano izquierda a Pitarque, por la TE-V-8042. Para nosotros el recorrido más espectacular, por su belleza. Tomamos el brazal y en breve nos rncontramos con los tuneles perforados en roca, tal cual, en estado puro, de los que ya no quedan. Atravesamos las sinuosas calles de Pitarque con la esperanza de que no se sigan estrechando y nos quedemos atascados con la moto, en dirección al Monumento Natural del Nacimiento del Río Pitarque, hasta un muro de piedra que nos indica que solo se puede seguir a pie , tarea ardua y penosa si solo llevamos botas de moto.

Retornamos por la misma carretera, sorteando recodos de una altura centenar, acompañados por la mirada verde y rumor del rio, hasta el cruce a Aliaga. Te recomendamos que recorras esta carretera no la olvidarás nunca, un ascenso por una pendiente de un 14 % de desnivel, con curvas de todos los radios en los que descubres porque han puesto avisadores en las estriberas. Aliaga cuenta con el único parque geológico en el que se puede observar la evolución de los últimos 200 millones de años de la Tierra. Retornamos por la carretera hasta el primer cruce con la ruta del silencio, giramos a la izquierda, pasamos el Hotel de la Trucha, Órganos de Montoro (en lo alto de un puerto hay un cartel que pone Órganos de Montoro - ahí no es donde hay que parar-) hay que continuar hasta la otra vertiente y encontraremos un area y un mirador para ver los Órganos de Montoro, unas formaciones calizas que parecen el organo de una catedral. Continuamos nuestra ruta y llegamos al espacio denominado "Masias de Ejulve", con vistas al agreste valle del Guadalope.

Continuamos nuestro camino y apenas a un kilometro haremos una obligada parada en el monumento The Silent Route. Con una estatua en homenaje a un macho cabrio montés "Silencioso", como le han apodado los motoviajeros. Desde el mirador contemplamos la sierra de Arcos, un retablo de montes, colinas, bosques, masadas, y valles que se extienden como capilares sanguíneos.

Seguimos serpenteando por el asfalto y llegamos a Ejulve, en el podemos ver impresionantes casonas renacentistas. Se adivina con pesar el final de la ruta. Este llega con la interseccion con la N-211, poco antes encontramos el cartel que anuncia el final de ruta.

Esperamos que la descripción y track te sirva para descubrir esta ruta o animarte a hacerla.

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