RDLF (I) TRIDENTE SIERRA GORDA, CALVARIO, SAN JULIAN

Noviembre va llegando a su fin, y con ello comienzo ya el entrenamiento para la Ruta de Las Fortalezas de 2023.

La dinámica consistirá en dividir los distintos tramos de la carrera en tres partes y tratar de añadir un entrenamiento semanal en torno a cada uno de estos tramos específicos.

El de hoy ha sido sin duda la parte de la Ruta más montañera.

Dejando el vehículo junto al faro verde, encaminamos nuestros pasos hacia detrás Vista Alegre por detrás del hospital. Esta zona nos permite rodar tranquilamente y sirve incluso como calentamiento y de antesala para lo que se viene.

Una vez en Vista Alegre comenzamos el ascenso a Sierra Gorda, montaña muy trailera cuyo desnivel y duración nos permite realizarla íntegramente corriendo. Aquí jugué un poco con las pulsaciones intentando regular la intensidad para no pasar de 160, aunque es una tarea complicada.

Una vez en la cima, comienza un descenso hasta la bifurcación que nos llevará a Lo Campano a través del Barranco de Orfeo. Uno de los rincones más bonitos de la ruta en mi opinión.

Al llegar a Lo Campano toca tramo de asfalto. La subida al Calvario es muy dura. Un Calvario, vaya. Esta parte creo que es aconsejable hacerla andando (habrá que hacer algún entrenamiento específico solo de andar rápido por esta zona), ya que el desnivel es muy bruto y encima es asfalto.
Una vez arriba visitamos la Ermita, foto, y se sigue el sendero que une por el collado este monte con el San Julian. Otra posibilidad aquí si queremos añadir más desnivel es bajar y hacer la subida íntegra al San Julian, pero eso a día de hoy se nos va de rosca.

Este collado no permite correr demasiado. Es otra de esas partes técnicas, donde debemos seguir los puntos de colorines dibujados en las rocas y que son bastante intuitivos.

Una vez en el vértice geodésico de la fortaleza de San Julian comienza el descenso, muy bueno para rodar rápido y recuperar segundos en nuestra ruta. Aquí en varias curvas hay desvíos con mayor o menor dificultad, siendo probablemente el que elegí (el más bajo, colindante con la subida a la chimenea) el más asequible y con menos desnivel.

Ya el resto es sencillo. Pasar junto a la playa de La Cortina y volver por el carril bici hasta el faro verde.

Total 23 kilómetros con algo más de 650 de positivo.