PR-G 2 Galiñeiro-Aloia

Ruta para darle zapatilla. Unos 19 kms y alrededor de 1200 m. de desnivel/acumulado, recorriendo de ida y vuelta el PR-G 2 que une los dos extremos de la Serra do Galiñeiro: el propio monte Galiñeiro, en Gondomar, y el monte Aloia, dentro del parque natural Monte Aloia de Tui. Un islote de paz en la provincia, donde los fines de semana podéis encontraros con gente haciendo prácticamente de todo: corriendo, btt, hípica, escalada, de paseo…

Delimitaremos el trazado lógico del parque natural, que miles de personas están pidiendo que se extienda de una vez por todas desde el extremo del Aloia para proteger toda esta sierra que tiene unos valores únicos, y que periódicamente está siendo amenazada por intereses industriales. Echadle un vistazo a la activa Plataforma Pola Protección da Serra do Galiñeiro para informaros de esta problemática.

Por ahora, nosotros a lo nuestro. El sendero no es una maravilla, todo hay que decirlo, porque nos hemos empeñado en seguir el sendero señalizado. Si os salís del PR-G 2 tenéis sitio de sobra por donde correr, subir y bajar montañas, trepar y descubrir caminos por doquier. E incluso el sendero merece mucho la pena por las vistas impresionantes que nos ofrece, y que abarcan desde Baiona, Cíes, todo el val da Louriña desde el Galleiro hasta el Miño, Portugal, el Miño desde Salvaterra hasta A Guarda, Tecla, Serrra da Groba... Impresionante. Una ruta perfecta para darle zapatilla, para correr bien a gusto, con tramos de pista (la mayor parte), pero también caminitos serpenteantes y roca en algunas partes.

La salida la hacemos desde el parque forestal de Zamáns al pie de la impresionante mole del Galiñeiro. Allí tenéis una gran área recreativa con aparcamiento, fuentes, merendero e incluso el refugio Miguel Regueira, del club de montaña Montañeiros Celtas. Desde allí enfilaremos el sendero, que está señalizado en todo su recorrido. Hay veces donde deberemos ser más cuidadosos, y andar con ojo, pero mal que bien lograremos alcanzar nuestro destino al pairo, sin GPS ni nada, cruzando la cresta de la sierra.

Ojo al llegar al monte Aloia, no os perdáis la impresionante muralla ciclópea que rodea la montaña, los restos de la citania de la cumbre o la capilla de San Xulián, que bordearemos para subir por el Vía Crucis (nunca mejor dicho) hasta la inmensa cruz que corona la montaña, y que nos ofrece vistas de toda la desembocadura del Miño.

Volvemos por el mismo sitio hasta el Galiñeiro. Y antes de volver a casa paramos a tomarnos un par de cervecitas en el Bar Antón, parroquia de Zamáns, para celebrar la carrerita mañanera mirando para la cresta del Galiñeiro.