Seoane do Courel - Paderne - Pedrafita - Seceda - Mercurín (31,45 km José Touriño Campelo)

Fecha realización: 15 de Agosto del 2014

Datos técnicos:

Distancia: 31,02 Km
Ruta Circular: Si
Grado de dificultad: Dificil
Acumulado vertical positivo: 1.284 m
Acumulado vertical negativo: 1.284 m
Altura máxima: 1.296 m
Altura mínima: 566 m
Tiempo corriendo: 6h
Pausas para visita y fotografía: 54m
Tiempo total: 6h 54m

Descripción:

En mi mente siempre esta la idea de volver a visitar la “Sierra do Courel”, pero al leer en un periódico la noticia de la grabación de un Oso asaltando un colmenar en la aldea de “Seceda” y visto que en mis correrías por la zona no había visitado los alrededores del citado lugar, me dispuse a volver por estos parajes y buscar una ruta que me permitiese recorrer los montes de la zona.

La ruta planificada fue salir de “Seonae do Courel” y tomar la senda señalizada que lleva a la aldea de “Paderne”. Esta parte de la ruta ya la había realizado en una ruta anterior pero el la otra ocasión pasado “Paderne” habia girado a la izquierda para visitar “O Castro de Brio” y luego dirigirme a “Mercurín”. Pero esta vez la ruta continuaría en continuo ascenso pasando por la aldea de “Pedrafita do Courel”. Al llegar al alto de “O Chao da Pedra” giro a la izquierda y tomo una pista de montaña que irá ascendiendo hasta llegar al “Alto do Lago”, lugar desde donde podremos disfrutar de una vista de 360º sobre todo el horizonte y ver una buena perspectiva de la sierra y los pueblecitos que la habitan.

Finalizada esta primera gran subida iremos en continuo descenso por las lomas de los “Montes do Lago” pasando por “A Campa de Rebordelo”, “As Rozadas”, “A Fontela”, “Penas Corveiras”, “As Costas” y “As Barreiras” desde donde podremos tomar un pequeño desvío de la ruta par visitar el “Castro” de “Pena das Anduriñas” justo antes de entrar en “Seceda” que nos sorprenderá por la cuidada restauración de sus bonitas casas y calles. Después de callejear un poco y acercarme a beber a su estupenda fuente de agua, emprendo la segunda parte de la ruta en dirección de retorno al lugar de partida.

Al abandonar el pueblo por su carretera de acceso y justo después de cruzar el puente sobre el “Regueiro de Seceda” a nuestra izquierda hay un camino de ascenso que nos interna en la montaña, el cual seguiremos en continuo ascenso en la que será la segunda gran subida de esta ruta. A lo largo de nuestro ascenso pasaremos los las lomas de los montes de “O Pontón”, “A Renselada”, “Os Pereiriños”, “A Veiga de Arcas”, “O Couso da Cruz” y “Pena Ferreira”, hasta llegar al alto de “O Redondal”, en donde veremos a nuestra derecha un poste indicativo que nos señala que este camino nos llevará al la aldea de “Mercurín”. Desde este punto ya iremos en continuo descenso hasta entrar en “Mercurín” y el impresionante “Souto” en donde está enclavado, pero no menos impresionante es su “Aciñeiral” (bosque de encinas) que nos encontramos al pasar el pueblo, en el lugar conocido como “Taras de Mercurín”. Sigo en continuo descenso hasta llegar a la “Ferrería Locay” desde donde tomo el camino de subida a “Seoane” hasta llegar al punto de partida de esta ruta.

He calificado la ruta como difícil, no por su dificultad técnica sino por su dureza debido a los grandes desniveles de la misma. Sobre todo si se hace corriendo como es mí caso. Por otro lado para los aficionados a correr por montaña, la ruta aunque dura es estupenda ya que transcurre siempre por caminos perfectamente identificados y según nuestro estado de forma podemos aplicarnos en correr sin necesidad de paradas por terrenos técnicos o peligrosos.

Por otro lado a lo largo de la ruta me he tenido algún encuentro interesante con su fauna local, como algunos grupos de Perdices que salían volando al ser sorprendidas con mi paso y en dos ocasiones lo que parecías ser Martas, ocurriendo lo mismo, saliendo disparadas rápidas como centellas. Por lo cual en ninguno de mis encuentros pude sacar ni una mísera fotografía.

Finalizo la ruta muy cansado, sobre todo porque llevaba dos semanas sin poder salir a correr y mi estado de forma no era el más idóneo. Pero muy satisfecho del recorrido realizado, los maravillosos paisajes y la fauna que me he podido encontrar (aunque no me hubiese encontrado ningún Oso).