Trail Alcalá del Júcar

Partimos desde la playeta de Alcalá del Júcar, tomamos una senda junto al río hacia la zona de pic-nic, ascendemos por unos escalones y se cruzamos la carretera que va a Jorquera.
A partir de aquí subimos por la senda de “Las Zetas” hasta las Casas del Cerro.
Sin llegar a entrar al pueblo giramos dirección este y tomamos una senda poco marcada, entre el monte y un campo de cultivo, hasta llegar a otra de bajada que nos lleva al cementerio donde encontraremos el primer avituallamiento.
Desde aquí llegamos a la carretera y unos metros más adelante cogemos nuevamente una senda, “La Gravera”, de subida que nos llevará de nuevo a las Casas del Cerro, desde donde hay unas vistas espectaculares del Alcalá del Júcar.
Iremos en busca de la conocida senda del “Corciolico”, por un camino que poco a poco se va perdiendo. La senda se inicia hacia la izquierda y con un descenso zigzagueante por la ladera del barranco hasta llegar a la carretera, que la seguiremos hacia la derecha unos metros, y encontraremos el segundo avituallamiento.
Volvemos con otra subida en la otra vertiente del barranco de La Noguera, para enlazar con un camino que nos sirve de unión con la senda del “Batán”, ya de bajada hacia un camino junto al río, donde se encuentra el tercer avituallamiento.
Cruzamos el río por un puente peatonal y comenzamos el ascenso por las callejuelas de Alcalá en busca de las cuevas del “Masagó” y del “Diablo”. Se tratan de unas cuevas excavadas en la piedra que atraviesan de un extremo al otro la montaña, de unos 800 metros. Estas cuevas son de propiedad privada, y para el día de la prueba nos dejan atravesarlas y disfrutar de sus encantos. A la salida de la última cueva seguimos ascendiendo por las calles del pueblo en dirección a Las Eras. Aquí nos encontraremos con la última subida, corta pero intensa, en la senda del “Bolo”.
Ya solo nos queda bajar hacia Alcalá por una senda que nos deja a puertas del Castillo, el cual atravesaremos para coger las últimas calles que nos llevan a meta.