Trail por Guara Este. Las Bellostas, Bagüeste, Letosa, Otín y Costera de Otín hacia Rodellar. Vuelta por la Losa Mora.

En apenas quince días he completado casi todos los retos que me quedaban en el entorno del Mascún. La carretera de la Guarguera está fatal. Las obras de los primeros 10 Km hasta Molino de Villobas prometen ser eternas y, encima, están bacheando hasta Laguarta y el puerto de Serrablo; ya sabes, paletada de gravilla y chorrazo de asfalto (letal para el coche). Sin embargo, la pista asfaltada hasta Las Bellostas no es un tapiz, pero se circula bien con un auto normal. Una vez en las Bellostas (80 Km y 1.30 horas desde Jaca), tomamos la GR que desciende al Balcez y continúa a Bagüeste. Última aldea despoblada de Guara que me quedaba por visitar. El pueblo está arruinado y lo salvan su posición dominante sobre el parque (qué vistas más impresionantes!), la Iglesia parroquial y la próxima ermita de San Miguel en un altozano. Continuamos hacia Letosa con desvío a la izquierda hacia el Saltador de Las Lañas (que podemos visitar) y Otín al que llegamos y nos refrescamos en la fuente con agua fresca y abundante que debes extraer con un pozo de manivela, a la vieja usanza. Allí se inicia la impresionante senda que por la Costera de Otín desciende al cauce (seco) del Mascún en dirección a Rodellar. Contemplamos las impresionantes formaciones rocosas de la Ciudadela, Cuca Bellostas y Torre de Santigo. Se alcanza un cruce, con la surgencia del Mascún, el Delfín, la vía ferrata a la ermita de la Vírgen del Castillo y a la izquierda la Garganta Baja o de Andrebod que tomaremos. Ascenso constante pero fácil. A la derecha, la cueva de Andrebod accesible por una empinada pedrera con moderado peligro. Alcanzamos una llanura herbosa desnuda y enfilamos por la izquierda la Garganta Alta hacia el mítico Dólmen de la Losa Mora (a la derecha barranco de Barrasil y bajada a las Gorgas Negras del Alcanadre) y vuelta a Otín. Retorno al coche desandando lo de la mañana. Si hubiera ido con más tiempo y fuerzas había pensado recorrer las dos fajas del Mascún: la de Otín cuya senda nace del pueblo (es impresionante) y la de la Zingla (peligrosa) para descender a los piés del Saltador de las Lañas. Estaba agotado por el calorazo (33º me llegó a marcar el termómetro digital al sol en pleno mes de octubre) y la sed (y eso que aprovisionaba 5 litros de isotónicas) así que no asumí más retos.
En abril o mayo con más tiempo se pueden juntar la ruta previa y esta que aquí presento.
TIEMPO EN CARRERA: unas 7-8 horas en tiempo real, pero es MUY DIFÍCIL hacer tiempos con tantos sitios por visitar y fotografiar. Típica ruta de día entero con preferencia a marzo-abril o septiembre-octubre para evitar el calorazo que pasé y tener horas de márgen con luz.
CICLABLE: Posible pero complejo en algunos tramos, claro. En la mayoría del recorrido se apreciaban rodadas. La costera de Otín en bajada me parece muy muy técnica por la piedra suelta y en subida por la pendiente. Casi lo mismo para la Garganta Baja.
Valoración Atlética: 8 Valoración Paisajística y Medioambiental: 9 Valoración Subjetiva: 9. NOTA MEDIA FINAL: 8,6