Uharte Arakil-Beriain (kilómetro vertical)

Subida a Beriain o San Donato desde Uharte Arakil. Hicimos esta ruta como preparación de la carrera “Km Vertical de Beriain” en la que íbamos a participar dos semanas más tarde.

Aunque la carrera sale desde el mismo pueblo, nosotros comenzamos en la zona de las piscinas/área recreativa, con lo que quitamos unos 700 metros casi llanos al recorrido.
Por otro lado, la carrera es solo en subida hasta la ermita de San Donato (algo más de 5 kilómetros de distancia y 1.023 metros de desnivel) y este track es de ida y vuelta por el mismo camino.

Nos pareció un recorrido precioso, más largo de lo que suele ser habitual en los kilómetros verticales, ya que los primeros 2 kilómetros tienen una pendiente muy suave, lo mismo que los últimos 500 metros. Esto hace que prácticamente la mitad de la distancia se pueda hacer corriendo.

Ya desde los primeros metros (saliendo desde donde salimos nosotros) el sendero discurre por el bosque, un bonito robledal al principio, donde la pendiente es muy suave, incluso con algún tramo llano. Más arriba la pendiente se acentúa y se sube por un hayedo.
Poco a poco el terreno va cogiendo verticalidad y desde la zona del avituallamiento (un pequeño claro donde cruzamos una buena pista forestal; Auntzaldapa-925m) la cosa ya se pone más seria.
Curiosamente, en este punto ya está hecho más de la mitad del recorrido en distancia, pero no en tiempo ni en desnivel, ya que lo más duro está por llegar.

Hasta salir a la campa superior el recorrido sigue de menos a más, pero lo realmente duro comienza a unos 1.200 metros de altitud, cuando en el cruce giramos a la derecha, dejando de lado el sendero que iría al Puerto de Uharte (ruta normal). A partir de aquí las rampas son ya superiores al 50%, incluso con tramos de barro, alguna pedrera incómoda y algún resalte donde hay que ayudarse de las manos.

Al salir a terreno despejado de árboles, ya muy cerca de llegar a la campa cimera, el porcentaje sube aún más (70% según los organizadores de la carrera, aunque me parece mucho…). En todo caso, a mí estos metros se me hacen menos duros que los anteriores, ya que el sendero es más limpio y menos técnico.

Una vez alcanzada la campa (cresta herbosa hasta la cima) la cabeza pide ir corriendo, pero al cuerpo le cuesta y dice que no. Este tramo es para mí el peor; eso sí, las vistas son espectaculares y si no fuera porque hay que ir a tope, sería para disfrutarlo mucho.

En resumen, como kilómetro vertical el recorrido es precioso; y si se hiciera como una jornada tranquila de montaña es para disfrutarla a tope, tanto del propio recorrido como de las vistas.