Cima del Ponoig (Ponotx) y del Sanxet. Circular con subida por la ferrata (sin salida rapelando).

NOTA IMPORTANTE: LA DIFICULTAD CON LA QUE CATALOGO MIS RUTAS ESTÁ REFERIDA PARA MONTAÑEROS HABITUADOS A CAMINAR, QUE SE DESENVUELVEN CON SOLTURA POR TODOS LOS TERRENOS, NO PARA SENDERISTAS OCASIONALES. SI TIENES POCA EXPERIENCIA, AÑÁDELE UN GRADO MÁS A LA DIFICULTAD DE MIS RUTAS PARA NO LLEVARTE SORPRESAS.

Interesantísima circular para ascender al Ponotx o Ponoig (también conocido como León Dormido) aprovechando la atractiva ferrata y luego subir a su vecino pico Sanxet. Es fundamental encontrar bien el paso que hay por encima de la ferrata para poder continuar ascendiendo hasta el pico, de lo contrario no hay otra salida a menos que lleves material para rapelar, que es lo que suele hacer la mayoría de la gente que la hace. Fui con mi buen amigo Alejandro, que ya conocía el paso y la verdad que me sorprendió el poder continuar subiendo cómodamente hasta la cima de esta espectacular montaña.
Comenzamos la ruta desde un camino rural a no mucha distancia del parking principal de la ferrata, bien cerca de Polop. Yo pienso que es más cómodo llegar al parking de la ferrata y no complicarse, ya que luego hay un buen camino a la sombra (cara este) del León Dormido. La ferrata del Ponotx está catalogada como K4, lo cual quiere decir que no es la ideal para principiantes. Sin ser difícil, sí que tiene algún paso algo atlético. Sube por una empinadísima arista que se ve desde la distancia. Por supuesto hay que llevar material para realizarla con seguridad y saber emplearlo (casco, disipador, arnés y guantes). Una vez estás en lo alto la gente suele caminar a derecha para bajar rapelando (2 rápeles que no llegan ninguno a 30m). Nosotros nos fijamos en la empinada pedriza que sube hacia unas paredes y comenzamos a subir penósamente por ella. Nos desviamos a izquierda para caminar junto a otra paredes ya que el terreno es más firme. Cuando llegamos al último pino (aunque arriba hay unos cuantos más) y se abre a izquierda algo el terreno buscamos una escasa sendilla que llanea y que pasa por el único sitio que parece transitable. Pronto encontramos un paso facilitado con una senda que nos confirma que vamos por el buen camino. Después hay que continuar buscando por donde seguir. Hay que seguir más bien hacia arriba y no irse demasiado a la izquierda. Una vez que hemos pasado estos tramos más aéreos el terreno se hace menos expuesto y ya solo es cuestión de continuar subiendo por un terreno de lapiaz rompebotas pero sin grandes dificultades. Nosotros nos acercamos a las paredes que dan a norte. Aún queda un buen rato hasta llegar a la cima del Ponoig, en donde no hay vértice alguno, si bien las vistas son impresionantes, con su vecino mayor, la cumbre del Puig Campana, dominando las vistas y la preciosa cresta del Castellet más abajo. Lamentablemente hay una calima muy intensa que limita mucho la vista. En vez de bajar por la senda marcada como PR, lo hacemos siguiendo más o menos la cresta que cae hacia collado que separa el Puig Campana del León Dormido. Una vez que llegamos a éste sólo nos queda continuar por la cómoda senda por la que nos acercamos al vecino Collado del Llam. Continuamos por el bonito PR, pero pronto nos desviamos a derecha subiendo por una pedrera, con algún hito perdido y alcanzando pronto la cuerda (sin llegar realmente a ir por ella) del Pico Sanxet. Vamos a derecha por la ladera siguiendo trazas por las que alcanzamos la cima de este vecino del Pontox. Para bajar continuamos por un interesante y escondido camino (marcado con hitos) que salva la pared noreste del Sanxet. Las vistas de las peñas secundarias que tenemos alrededor son impresionantes (lástima de no disponer de más tiempo para acercarnos a éstas). Nos vamos desviando a izquierda por una larga pedriza hasta internarnos en el frondoso bosque mediterráneo por donde la senda va perdiendo traza hasta que desaparece. Ya cerca de la Casa de la Carrasca reaparece algo de traza por la que alcanzamos de nuevo la bonita senda marcada como PR. Por ella retornamos de nuevo al Collado del Llam, para comenzar la larga bajada (con vistas a las espectaculares paradas que cierran el Sanxet por su cara sureste. Acabamos saliendo a una pista, por la que retornamos al punto de inicio de nuestra ruta.
Es una excursión muy atractiva si te gustan las ferratas y quieres combinar e