Ferrata de Cisterna versión K3

Partimos desde un pequeño aparcamiento que hay justo enfrente de un coche de los Picapiedra. De ahí sale un camino hacia abajo que nos lleva a una senda verde, donde antiguamente pasaba el ferrocarril. Cruzamos el puente y giramos a la izquierda. Aquí hay unas mesas y bancos muy al sol. Cruzamos un canal donde va el agua a toda velocidad y giramos nuevamente a la izquierda, hasta llegar a otra mesa con bancos y una fuente (sin agua ahora) donde está el inicio de la ferrata.

El inicio de la vía es muy vertical, siempre teniendo grapas donde agarrarse y apoyarse. Al poco de subir se encuentra el desvío que nos lleva a la izquierda a la variante K6, con una escalera colgada que hace péndulo y un tramo desplomado. Nosotros vamos por la variante fácil, la K3.

Al pasar este primer tramo nos encontramos con más puntos donde hay que agarrarse y apoyarse en la roca, convirtiéndose a tramos en un camino equipado.

Tras superar una pequeña arista tenemos una vía de escape a la izquierda por si alguien quiere dar la vuelta por camino.

Seguimos trepando de nuevo por roca y de nuevo con algún tramo raro en el que toca ayudarse de la roca. Nosotros estos tramos los sorteamos de forma completamente diferente, ninguna mejor que otra, el caso es subir.

Llegamos al tramo del puente, que son una sucesión de tablas longitudinales con una pequeña separación entre ellas. Si hay algo de viento se mueven, y sí, da sensación, impresiona, pero no en exceso ya que no hay una altura excesiva.

Pasado el puente subimos un pequeño tramo de nuevo sin grapas, pasamos al otro lado de la roca, cresteamos un poquito y subimos el último tramo.

Ahora nos toca la bajada. Esta parte es un poco puñetera... Ya que hay cable de vida pero no hay grapas, al principio, luego las hay pero al estar bajando no se ven bien.

La vuelta la hacemos ya por camino. Hay un punto en el que se pasa justo en frente del puente, por si tenéis alguien que no haga la ferrata es un punto excelente para sacar fotos de la gente pasando por el puente.

El camino resbala un poco porque es tierra suelta. En un momento nos plantamos de nuevo en el aparcamiento.

En resumen, no nos pareció una ferrata tan fácil como leímos por aquí (cada uno con su nivel). Requiere unos conocimientos mínimos para usar las manos y pies y por supuesto buen calzado. Nosotros no llevábamos el más adecuado porque contábamos con que iba a ser todo grapas. Y en cuanto al factor psicológico la parte con más dificultad puede ser el inicio por ser más vertical.

Durante julio y agosto del 2023 la ferrata es gratuita. De lo que pasará luego aún no han anunciado nada.

Sin duda alguna es una actividad muy divertida y muy recomendable.