VIA FERRATA EL CASTELLASO - BENASQUE 12-10-2020

Cómo llegar
Sesué es una pequeña población que se encuentra unos 11 km. antes de llegar a Benasque viniendo por la A-139 desde Castejón de Sos. Para llegar a la ferrata, no tenemos que entrar al pueblo. No cruzamos el primer puente que nos lleva a Sesué, seguimos de frente hasta el segundo puente, hacia el Camping La Borda de Arnaldet. Después tomamos el desvío arriba a la derecha, indicado con un cartel de madera -ferrata-, camino que pronto se convierte en una sinuosa pista. (No tomar el camino que baja al camping) Podemos aparcar en el margen del camino pasadas unas curvas.

Acceso
La ferrata es visible desde lejos, pues la cantera en la que transcurre no pasa desapercibida. Unos altos postes de hierro, antiguas instalaciones, sirven de referencia para encontrar el inicio y también ayudan las marcas rojas en la misma pista de tierra donde aparcamos el coche. Al llegar al panel de la vía ferrata nos faltan 20 metros para iniciar la vía, junto a grandes bloques de piedra.

Recorrido
Esta vía ferrata ha sido para nosotros una muy grata sorpresa. Pensando que quizá sería una vía más bien sosa y sin dificultades, la verdad es que es al contrario. Está tan ingeniosamente equipada y trazada, que aprovecha al máximo el desnivel del Castellaso para ofrecer un recorrido variado y sobretodo aéreo.

El inicio sirve de perfecto calentamiento, en los últimos pasos antes de llegar a la zona vertical, no disponemos de grapas sólo cable de vida, con lo que debemos avanzar escalando, buscando las presas en la roca. Para los que no estamos habituados la experiencia es bastante emocionante.

Mezcla de escalada y vía ferrata este corto itinerario gustará a los ferrateros con ganas de pasos deportivos y expuestos

Cuando llegamos a la parte vertical, ya aparecen las grapas y es que sin ellas sería difícil avanzar, contamos varios repechos desplomados, unos cuatro y cada vez más y más patio. La ferrata sube vertical como si de una clásica directísima se tratara. Los desplomados, todos cortos y muy bien equipados, nos exigirán trabajo de brazos y temple.

Al final llegaremos a una zona herbosa, la ferrata continua a la izquierda con un pequeño repecho sin dificultad que nos dejará en la cima del Castellaso, mirador natural del valle del río Ésera y de los Pirineos.

Regreso
Desde la cima tomamos una senda que desciende hacia el norte. Al llegar a un prado la senda gira paulatinamente al este y vemos en frente una pequeña masía y la Ermita de San Saturnino que se levanta en un balcón natural. El camino serpentea entre la masía y la ermita que quedará por encima nuestro a la izquierda. Tenemos visible en todo momento el coche y la pista de la aproximación, que encontraremos un poco más abajo.