Ávila monumental. Anthercas

Salimos desde el inmenso aparcamiento de autobuses, coches y autocaravanas (40°39'39.34"N 4°42'15.89"W), pasamos la rotonda de la Avenida de Madrid, ascendemos por los escalones hacia la Puerta del Carmen entrando en la zona amurallada que vamos a recorrer exclusivamente.

Rodeamos el parador de Turismo por la Calle Marqués de Canales y Chozas, giramos por la izquierda siguiendo la Travesía y Calle Brieva, en la Plaza Fuente del Sol vemos el Palacio de Don Diego de Bracamonte, familia procedente de Francia, que se asentó en Ávila durante la época de la Repoblación, el techo de la entrada es una filigrana de artesonado, de planta cuadrada, tiene un patio central porticado de cuatro galerías y arcos corvados (propios de la estructura de los puentes) sobre delgadas columnas, único de su estructura primitiva. Ahora es sede de algunas dependencias de la Junta de Castilla y León.

Seguimos junto a la Iglesia de Mosén Rubí, para tomar por la izquierda en la Calle López Nuñez donde se encuentra el Palacio de Los Verdugo, construido en el primer tercio del S.XVI, en sillería de granito, la larga fachada flanqueada por dos torres apenas sobresalientes, de carácter defensivo, es plateresca, con portada adintelada y escudos nobiliarios, el patio central tiene arcadas con decoración floral y escudos de diferentes linajes abulenses. Alberga la Sede de Ciudades Patrimonio de la Humanidad, el Archivo Municipal y la Concejalía de Patrimonio y Turismo.

Desde la Puerta de San Vicente continuamos por la Calle Tostado a ver la Catedral de Cristo Salvador de Ávila, primera catedral gótica de España, proyectada como templo y fortaleza, su ábside es uno de los cubos de la muralla de la ciudad. La mayoría de los historiadores otorgan al maestro Fruchel la autoría de la catedral y la fechan en el siglo XII.
En la catedral reposan los restos mortales de Adolfo Suárez, Presidente del Gobierno de España de 1977 a 1981. Enfrente vemos el edificio del Episcopio o Antiguo Palacio Viejo (antiguo palacio episcopal de Ávila denominado Palacio del Rey Niño de Ávila. Alberga la biblioteca pública y correos.

Rodeamos el Claustro de la Catedral por la Calle Cruz Vieja y desde la Plaza de Adolfo Suárez con estatua y fuente ajardinada, enfrente se halla la Puerta de El Alcázar, que da a la Plaza de Santa Teresa y la Iglesia de San Pedro, proseguimos por la Plaza de Santo Tomé donde se halla el Palacio Episcopal sede del Obispado, fue con anterioridad la casa de los señores de Navamorcuence, pasó en el siglo XVII a los jesuitas y, al ser expulsados de España en el XVIII, al obispado.

Adosado se encuentra el Palacio de Los Dávila, de carácter defensivo, construido en el S.XIII, del mismo material granítico que la muralla, destacan dos puertas en arco de medio punto, una ventana renacentista y un frontón con el escudo de armas de los Dávila.

El emplazamiento de casonas y palacetes intramuros, revela el agrupamiento de las familias abulenses de acuerdo con su linaje y a razones defensivas, ya que a los caballeros correspondía la defensa de la ciudad, de ahí su vinculación a la muralla.

Desde La Poza del Rastro llegamos al Palacio de los Mújica (Torreón de los Guzmanes), de principios del S.XVI, destaca el imponente torreón esquinado coronado por almenas y atalayas. Sede de la Diputación Provincial de Ávila, las antiguas caballerizas albergan un Centro de Interpretación de la cultura vetona, conserva el artesonado mudéjar del patio.

Por la Calle Madre Soledad pasamos por el Convento de Santa Teresa, El convento, inaugurado en 1636, fue edificado sobre la casa natal de Santa Teresa de Jesús, proyectado por el arquitecto Fray Alonso de San José. Destaca la fachada de estilo Barroco Carmelitano, y la planta de cruz latina, cuyas naves laterales albergan magníficas esculturas del maestro Gregorio Fernández. La cripta convertida en “Museo” invita a descubrir la personalidad de esta gran mujer.

Continuamos desde la Portada de la Iglesia de Santa María Escolástica por la Travesía de Santo Domingo, torciendo a la derecha y entrando en el Palacio de Polentinos, de principios del siglo XVI, ejecutado en sillería y mampostería de granito, incorporando el lenguaje plateresco en la ornamentación de su portada con motivos militares, y en los dinteles del patio con medallones.
Desde 1993 es Archivo Histórico Militar, recorrimos en solitario sus dependencias sorprendidos por la cantidad de información, maquetas, maquinaria, armamento, trajes, equipamiento, etc. en este Museo del Ejército.

Desde las calles Ramón y Cajal y Don Ramón accedemos a la Iglesia de San Esteban, única iglesia románica que se conserva intramuros.
Por la Travesía de San Esteban llegamos hasta la Puerta de Malaventura, por sendero bajo la muralla con excelentes vistas, vamos volviendo siguiendo la línea amurallada a la salida.

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