BOSQUE DE SECUOYAS DEL MONTE CABEZON

Durante los años 40 se decidio plantar mas de 800 secuoyas en el Monte Cabezon por su rapidez de crecimiento y asi proporcionar madera a la industria del lugar, pero cuando tuvieron las dimensiones apropiadas para la tala, esta madera ya no interesaba y por lo tanto se quedaron alli plantados. El resultado de este abandono, sin embargo, ha sido espectacular, pues hoy en dia podemos disfutar de un tupido bosque de secuoyas de gran altura y una senda que nos permite dar un agradable paseo en todas las epocas del año. El bosque fue declarado Monumento Natural en el año 2003.

RUTA:
Iniciaremos la ruta dejando nuestro vehiculo en el aparcamiento superior, señalizado con waypoint como aparcamiento 1, por ser de mayor capacidad y de mejor acceso. Desde aqui bajaremos ya caminando por una via adaptada que circula junto a la carretera, hasta llegar al acceso del propio bosque por una pasarela de madera adaptada para personas de movilidad reducida, todo un acierto. De esta manera nos adentramos en un espectacular bosque de secuoyas que, gracias a que son arboles de hoja perenne, gozaremos de sombra casi perpetua, cosa que en verano se agradece mucho, facilitando su visita a cualquier hora del dia.
Terminamos la pasarela y nos adentramos cada vez mas en este precioso y grandioso bosque a traves de unas escaleras bien integradas en el paisaje, que nos van a llevar a la parte mas baja del mismo, donde vamos a encontrar los arboles de mayor tamaño, tanto en altura como en grosor. Al lado de estos te sientes pequeño, casi insignificante, y saboreas la grandiosidad de la naturaleza que se traduce no solo en grandes montañas, esas que nos gustan tanto, sino tambien en muchas de sus acepciones, en este caso en forma de arboles.
Asi, vamos recorriendo cada rincon de este maravilloso bosque, dando un poco de rienda suelta a nuestros pasos, intentando abarcar todo el perimetro del mismo, empapandonos con las magnificas postales que nos ofrecen estos grandiosos arboles.
Poco a poco vamos ascendiendo de nuevo, regodeandonos en cada rincon, buscando ya la salida del mismo. El recorrido no es extenso, es solo un paseo, pero un paseo lleno de magia y grandiosidad. Algo dificil de olvidar.
En la salida encontramos el segundo aparcamiento, mas limitado en plazas de vehiculos, aunque evidentemente mas cercano, pero como ya digo, las distancias son escasas. Retomamos el camino de vuelta al primer aparcamiento con la satisfaccion de haber visitado un autentico MONUMENTO NATURAL. Valio la pena.

Nos vemos en los montes.

NOTA:
La dificultad de cada ruta depende de factores tan distintos como la longitud de la misma, el desnivel positivo, el desnivel negativo, el estado del terreno que pisamos, la meteorología reinante en ese dia y sobre todo la condición física y psicológica con la que afrontemos la ruta. Por lo tanto la calificación de cada ruta es subjetiva y habrá de amoldarse a todos estos factores en particular.