Camina que te cuento

**Aprovecho el día internacional de la Poesía para subir esta hermosa ruta junto a Nala** (Patty)

¡'Pasegar' es tan divertido! y entrenamos el sentido de atención, ¡Que está en peligro de extinción! Y sin querer ha salido un pareado, aunque ya veréis como esta ruta está llena de ritmo y rima.

Pasear y jugar al mismo tiempo es algo que van unidos, ¿Qué me cuenta lo que miro? Todo esto nos lo narra Nala, que con esos ojos tan enormes es capaz de fijarse en las cosas más pequeñas y transformar lo habitual en algo distinto con voz propia... Os dejo con su voz en off:
((Recomendación de lectura: viendo los waypoints para seguir la foto-historia tras la descripción))


Érase una vez y no érase una vez, una ciudad llena de árboles y cemento, donde lo primero resultaba fácil obviarlo y venerarlo al mismo tiempo, y lo segundo, estaba sobrevalorado... Tanto siento que es así que he decidido fijarme durante mi paseo prácticamente en una sola cosa: la vegetación, ese ser vivo, aparentemente inamovible y silencioso, que en realidad está siempre lleno de movimiento y sonidos, pero solo para los que observan curios@s abriendo oídos y corazón...

1&2) "Fue el tiempo que pasaste con esa rosa lo que te hizo tan importante" (cit. El Principito) Me vino esta frase de Exupéry, de tantas veces que mi mamá leyó El Principito y se quedaron algunas frases flotando en mí. Mientras paseo por este parque sentipienso que todos deberíamos de sentirnos alguna vez en la vida como rosas... Yo... Así me siento, ¡cómo una bella rosa en este jardín!

3) Seguí sin rumbo cierto, más guiada por un olfato que busca entre callejuelas algo verde u olvidado... Cuando llegamos por vez primera a un parque medio escondido y medio raro...

"Por las calles voy dejando
algo que voy recogiendo:
pedazos de vida mía
venidos desde muy lejos (...)"
(Estracto poema M.Hernández).

4) Y como dijo García Lorca, -la poesía es algo que anda por las calles-, y también te late en los pies, si no ¿Cómo puede ser que hayamos llegado sin querer, a otro parque con presencia poética? al Parque Antonio Oliver...
"Como el verso de ocho sílabas/ el molino de ocho aspas./ Las palabras son las velas./ Las velas son las palabras".

5, 6 & 7) Y seguimos adelante, entre palabras, calles y sus secretos... Cuando de pronto... ¡Una calle de árboles espejo! ¿Los conoces? Llenos de raíces aéreas, están hechos de ramas que crecen hacia abajo. Los llaman Ficus Benghalensis, más comúnmente conocidos como el árbol de las lianas. (¿A ti también te gustaría hacer un 'pasego' de bosque de liana en liana? : D ¡Yo me lo pido para mi cumple! )

8) En los siguientes pasos encontré esta palmera abanico que me dijo algo, algo me dijo... ¡¡¡Sácame de aquí!!!... Hay tantas plantitas a las que rescatar, pienso... Rehenes verdes, caprichos de ciudad.

9) Miramos, miramos y no dejamos de mirar... Nos topamos con un pequeño festín visual, con una de las flores más exquisitas, hermosas y puras, y nos deleitamos con los versos, de nuevo de Miguel Hernández: "Flor del almendro temprano:/ preliminar inocencia./ Aún no ha hecho el frío cano/ discursiva su abstinencia./ Aún la verde diligencia/ es ociosidad sutil;/ y ya, a pesar del hostil,/ en su detrimento, enero,/ por su testigo primero/ se propone blanco abril".

10) Y si miro hacia abajo, no hay festín de la belleza que no tenga un espléndido final: colorido confeti natural.

11) Seguimos este itinerario improvisado con aires de fiesta y de pronta primavera, me imagino que voy como ellos, vestida de sirena de tierra, cuerpo de tronco, y cola de enredadera.

12) Y cuál es mi sorpresa, cuando, seguimos caminando y escucho un sonido de la naturaleza antinatural... Un pájaro enjaulado que dice... ¡¡SOCORRO NO PUEDO VOLAR!! 😢

13) Prosigo después de este gran disgusto, sin terminar de entender cómo aún podemos amar más escuchar a un pájaro cantar, que su libertad... Tengo un oído chiquitito pero ya puedo reconocer los versos más tristes, y escribir una canción desesperada como Neruda...

Por suerte, a lo lejos ¡asoma un molino! Y mi imaginación, sin jaulas, empieza a volar... Y recuerda, en mi memoria, mezclada con la de mamá, el fantástico poema de nuestro poeta Cartagenero Antonio Oliver, "Molino", de 1935:

"Erguido estás, arcángel de ocho alas,
en medio de mi campo levantino.
Erguido frente a costas que en sus calas
de tierra, te dan un aire puro y cristalino.

Con el día se encienden tus bengalas,
tus antorchas de faro campesino.
¡Oh, qué despiertas glorias nos propalas
en el ligero viento matutino!

Como hermanadas van tus ocho velas,
yo hermano con la luz el alma mía.
¡Qué libre el blanco corro de tus telas,
distancias de sol y de poesía!

Ocho alas de arcángel; ocho rosas
abiertas a las nubes, frente al cielo.
Ocho velas de arcángel; ocho esposas
del agua que se guarda en el subsuelo".

14) Y entre árboles y cemento, encuentro un edificio extraño, ajeno a su tiempo... Gaudí dijo que "la originalidad consiste en el retorno al origen; así pues, original es aquello que vuelve a la simplicidad de las primeras soluciones". O sea, una llamada a la naturaleza... y yo... ¡Tan contenta! : )

15) Ya de camino a casa voy pensando en un buen tazón de leche... ¡Quiero ser alta como ese árbol y fuerte como el mármol!

16) En fila y ya oscureciendo aparecen estos árboles desnudos de frío y viento, un desfile de ramas, iluminadas por las calles de la ciudad.

17) Y de nuevo la vía verde, que de noche es gris, roja y marrón. Me dice que ya termina el 'pasego', y con él me deseo, dulces sueños de leche y amor.