El Llano de María - La Milagrosa - Pino Santo Alto

Los beneficios de caminar son variados. Si buscamos intensidad, podemos hacerlo a paso rápido y estaremos llevando a cabo uno de los ejercicios más fáciles y compensatorios. Además, este es adecuado para todas las edades. Dale un vistazo a la siguiente información y descubre por qué vale la pena caminar todos los días.
Los amantes de la montaña y el senderismo aprovechan el más mínimo darse una escapada a los senderos de Gran Canaria. Porque Gran Canaria no es sólo una isla llena de playas. Es también un continente en miniatura, con buen clima prácticamente todo el año. Un continente a pequeña escala, en mitad del mar, con una particular mezcla de ingredientes que la convierten en un caramelo para los senderistas.
Su intrincada orografía es el primer ingrediente. Luego se añade la curiosa mezcla de palmerales y pinares, de barrancos y senderos reales que se enredan por las montañas, formando un puzzle de paisajes cambiantes, tan distintos entre sí como los tipos de yogur de un hipermercado.
En este caso el inicio de la ruta se sitúa delante de la asociación de vecinos del Llano de Maria Rivera, contemplando el conjunto histórico artístico de la presa y la cancha que le rodean, quedando a su espalda (al oeste) el barrio de Siete Puertas. La carretera de acceso, actual calle Llanos de María Rivero, conforma el deslinde municipal entre Las Palmas de Gran Canaria al norte y Santa Brígida al sur.
Al salir del llano de Maria Rivera y subir por el Corcovado llegaremos al barrio de la Milagrosa, barrio muy popular por sus bares y bailes. Y nuestro destino final será el Barrio de Pino Santo Alto.
Este lugar se encuentra entre los municipios de Las Palmas, Santa Brígida, Teror y San Mateo. Se sitúa en las medianías de la vertiente norte de la Isla, atravesada por importantes barrancos como los del Acebuchal y Guiniguada. En su cauce es donde se encuentran los materiales más antiguos, y en la caldera de Pino Santo, los más recientes.
Es un espacio de carácter rural y de gran belleza paisajística que mezcla naturaleza, zonas tradicionales cultivadas y sectores habitados de interés cultural.Su nombre proviene de la leyenda del Pino Santo de Teror, que cuenta que la Virgen del Pino fue hallada entre las ramas de este enorme árbol, ya derruido, que creció junto a la capilla.
Durante toda la ruta contemplaremos bastantes ejemplares de palmera canaria.