Galarregi desde Nabarniz (10-02-2017)

Excursión corta y fácil, que se realiza en su práctica totalidad por pistas de buena traza, por lo que resulta adecuada para hacerla en invierno (apenas se encuentra barro) o en cualquier época del año en plan familiar. La cima, aunque está cubierta por un bosque de pinos jóvenes, ofrece en la actualidad unas vistas espléndidas sobre la costa guipuzcoana y especialmente hacia el interior, tanto de Gipuzkoa (Larhun, Aiako harria, Izarraitz, Aralar...) como de Bizkaia (Illuntzar, Oiz, Gorbeia, Sálvada, Ganekogorta, Eretza...).

Aparcamos el coche en la explanada contigua al frontón, muy cerca del Restaurante Nabarniz, bajando (E) a una calle inferior, en la que giramos a la izquierda y por la que vamos descendiendo (NNO), junto a varios chalets unifamiliares, hasta desembocar en una pequeña rotonda de la carretera que comunica Nabarniz con Ereño. Siguiendo por ella hacia la derecha (dirección Ereño), en unos 6 minutos desde la rotonda llegamos al barrio de Zabaleta.

En este barrio, al llegar a un área de descanso con bancos y fuente, justo al lado de una parada de Bizkaibus, debemos abandonar la carretera y tomar a la derecha una pista hormigonada que va ganando altura y nos conduce (NE) sin pérdida al collado de Kutzegane. Unos metros antes, el suelo de tierra ha sustituido al de hormigón. Las alternativas que se presentan en este cruce de caminos con fuente se muestran con claridad en los indicadores existentes. La pista de la izquierda conduce a Ereño, mientras que la de la derecha se dirige al hayedo de Airo ('Airoko pagadia'), saliendo de la misma, unos metros más adelante, otro ramal a la derecha que asciende al monte Illuntzar.

Nuestra ruta, sin embargo, es la que sigue al frente, dirección Galarregi. La pista, ancha y de buen firme (tierra y gravilla), toma un rumbo inicial Este y luego gira al Norte, mientras se interna en el pinar. Tras una pronunciada curva a la derecha con pendiente, el camino discurre a media ladera (E, luego ENE), hasta llegar a una curva en la que aparece una encrucijada de pistas. Desde Kurtzegane hasta aquí, habremos tardado menos de 20 minutos.

En esta encrucijada abandonamos la pista principal, que gira a la izquierda, y seguimos la pista que está más a la derecha. Por ella, con fuerte pendiente (NE), pronto accedemos al cordal superior, en un collado situado al Este de la cumbre, donde se localiza un nuevo cruce de rutas. Podemos continuar tanto de frente (más directo) como por la derecha. Si optamos por esto último (NE, NNE), en la próxima y cercana bifurcación giramos a la izquierda (ONO), llegando de inmediato a otro cruce en el que se une por la izquierda la pista citada antes como más directa.

Seguimos ahora de frente (ONO), en dirección a la cima, visible al fondo. Si hubiéramos tomado la opción más directa, en el último cruce debemos girar a la izquierda. La pista discurre sin apenas desnivel entre una plantación de árboles hasta situarse bajo la cumbre, donde gira a la derecha para realizar un rodeo de la loma por el Este y Norte, que nos ofrece una buena vista sobre Ispaster y el monte Otoio. Ahora, hay que prestar atención hasta ver un hito en el costado izquierdo de la pista, en un punto situado al NE de la cima. Aquí, una débil traza de senda se abre paso entre pinos jóvenes y nos conduce en unos 3 ó 4 minutos a la cumbre de Galarregi (596 m).

La vuelta se realiza por el mismo itinerario.

Tiempos netos de marcha a ritmo tranquilo: de Nabarniz (frontón) al collado de Kurtzegane: 30 minutos. Del collado de Kurtzegane a la cima de Galarregi: 35 minutos. Vuelta de la cima de Galarregi al frontón de Nabarniz: 50 minutos. En total, 1 hora 55 minutos.

Desnivel total aproximado: unos 340 metros.