Geolodía 2022: Los Estanys d'Estaña. Un acuífero kárstico singular | BENABARRE

Punto de encuentro

Parada 1: El agua subterránea

El agua subterránea es un recurso geológico imprescindible para el ser humano, por eso los habitantes de Estaña aprovecharon la fuente que puedes contemplar en esta parada. Las estructuras como el lavadero y el abrevadero sirvieron para dar un buen uso a este bien común y, hoy en día, representan la memoria del que fue uno de los rincones más apreciados del pueblo. En la actualidad, el agua que mana de la roca caliza está desviada a una toma de captación que la conecta directamente a la red de abastecimiento para propor- cionar agua corriente a toda la población. Esta fuente se debe a la existencia de una reserva de agua, cuyo término geológico es acuífero, que circula por el interior de las rocas. Las zonas más altas del relieve, cerca de Estaña, absorben grandes cantidades de agua y es, en ese momento, cuando comienza su lento viaje subterráneo a través de las grietas y fracturas de las rocas calizas que termina cuando alcanza las zonas más bajas donde brota a la superficie del terreno. La rama de la geología que se encarga de estudiar el origen y la formación de acuíferos como el de Estaña se denomina hidrogeología.

Parada 2: El origen de los Estanys

El término geológico karst proviene de la palabra eslovena Kras, una región de este país destacada por las formas tan llamativas que resaltan en sus paisajes rocosos. Estas estructuras se conocen como morfologías kársticas y engloban todas las formas, tanto de la superficie como del subsuelo, resultantes del prodeso de disolución de las rocas. Este tipo de figuras se dan mayoritariamente en rocas solubles con un gran número de grietas conectadas entre sí por donde circula el agua durante muchos años, décadas, siglos o incluso milenios. Las formaciones rocosas del periodo Triásico (hace unos 230 millones de años) que caracterizan el entorno de Estaña presentan niveles de calizas, yesos y otros minerales, como la halita (sal común), materiales muy solubles en los que se han producido procesos de karstificación. Los estudios hidrogeológicos estiman que el karst de Estaña, a pesar de presentarse en unas rocas tan antiguas, apenas tiene 50.000 años. Las morfologías que originan las Lagunas de Estaña se conocen como dolinas.

Parada 3: Profesionales del agua

La captación del agua subterránea, tal y como se realiza en la actualidad, ha supuesto un gran beneficio para el ser humano. Gracias a la hidrogeología podemos obtener y mantener, con garantías, este bien natural, almacenado en el subsuelo, esencial para nuestra vida y la de los demás seres vivos. Las personas especializadas en esta disciplina necesitan dominar otras áreas de la geología, conocer ciertas cuestiones relacionadas con las matemáticas, la química, la física y, además, necesitan estar familiarizados con conceptos referentes a la climatología, la ingeniería, la economía o la legislación. En los estanys de Estaña el/la hidrogeólogo/a se encarga de tomar muestras de agua de cada uno de los sondeos existentes con el fin de vigilar la salud de este humedal protegido por su alto valor ambiental. La analiza “in situ” para obtener valores de varios parámetros físico-químicos indicativos de la cantidad y calidad del agua. Para realizar esta labor utiliza dos instrumentos cotidianos en su trabajo de campo: una sonda de nivel que le permite conocer la profundidad del nivel piezométrico (aquí, en el sondeo, el agua se encuentra a 15 metros) y un multiparamétrico para medir la conductividad y el pH. Finalmente, constata que los valores obtenidos estén dentro de unos rangos estipulados para conservar la biodiversidad de las lagunas.

Parada 4: 20.000 años de historia

Las masas de agua, como las lagunas de Estaña, conforman elementos singulares del paisaje que brindan una valiosísima información del pasado climático y ambiental a nivel regional e incluso global. Los estanys constituyen un registro climático. Su morfología funciona como una auténtica trampa en la que el material procedente tanto de fuera como de dentro del sistema lacustre, es arrastrado y sedimentado en finas capas en el fondo. Los estudios geológicos realizados referentes a la alternancia y la composición de estas capas han revelado que las lagunas albergan varias decenas de metros de sedimentos en los que ha quedado reflejada la historia local de los últimos 20.000 años. Historia que incluye también la interacción e impacto de los pobladores de Estaña en el entorno.

Parada 5: La Clota

En esta parada, puedes contemplar una extensa zona deprimida, es La Clota. Su nombre procede del catalán clos y a veces clusa o cros, que significa lugar cerrado y hundido. Es equivalente a la palabra castellana hoyo, aunque no tiene el mismo origen. En este caso, el vocablo tiene procedencia latina, de la palabra claudere, que significa cerrar y también encerrar. Es decir, el topónimo aplicado en la zona indica plenamente su significado. Se trata de una zona hundida por todas partes, cuyo desagüe es subterráneo. Se trata de una estructura kárstica denominada poljé. La carretera que conduce a Estaña lo corta por sus sectores más occidentales. Cuando llueve mucho, el agua se encharca en las zonas más profundas, en donde hay un sumidero que hace de desagüe natural. Más tarde, las aguas reaparecen al Noreste, cerca de la ermita de Sant Esteve (o San Esteban) donde se forma, temporalmente, una laguna de pequeñas dimensiones que vierte sus aguas a otro poljé, el de la Font de les Olles. Se trata de una manifestación más del conjunto de formaciones de origen kárstico que hay por los alrededores de Estaña, cuyo nombre está estrechamente ligado a la existencia de dife- rentes estanys.