Nocito, barranco la Pillera, badina Estañonero, Brazo de mar, surgencia de Fuendeguaril

Paseo ideal para hacer con niños, poco exigente en lo físico y variado y muy entretenido, lo que hace de una ruta perfecta para pasar toda una mañana. Tiene versiones circulares más exigentes para el que lo desee.
Más de 10 vadeos de río requiere con lo cual es conveniente llevar sandalias o zapatillas de río y otras para cambiarse.
Dejado Nocito y tras unos cientos de metros en coche por la pista hemos aparcado. A partir de ahí otros cientos de metros por el que es salida de la ruta hacia Vadiello, por el camino de los carboneros, para girar a la izquierda y empezar a cruzar el río. Casi todos los cruces de río requieren mojarse los pies, hoy, aunque en otras épocas lo hemos visto más seco.
El camino discurre entre vadeos y senderos, puentes artificiales y recovecos mágicos, hasta encontrar en menos de una hora la Badina de Estañonero, lugar impresionante con una cascada y una auténtica piscina natural. Frías, muy fría, eso sí. Dejamos la badina cruzándola con el agua hasta las rodillas y seguimos 5 minutos arriba hasta llegar a la cueva de Brazo de Mar. Una pequeña cueva que está señalizada(si no sería difícil de ver) Entras en la oquedad, bajas por camino húmedo unos metros, con cuidado, y llegas a una pequeña galería inundada. Se requiere linterna para ver algo. No nos hemos adentrado más en la cueva.
Seguimos camino arriba hasta la surgencia de Fuendeguaril, una salida de agua cristalina que nace de las entrañas de la montaña y nutre el río de Guatizalema que baja por la Pillera, al que luego en Estañonero se une también el agua que viene del barranco de Abellada, creo que de un arroyó nacido en la fuente de la Espátula. Desde la surgencia nos hemos dado la vuelta. Hay opción circular siguiendo adelante pero se sentía muy vestida, al margen de que es larga y los niños iban cansados. Nos hemos bañado en la badina, y comido en la orilla.
Hay una ruta circular para la vuelta a Nocito, que bordea la badina de Estañonero y sube por un lado, remontando arriba el barranco de Abellada. Requiere una trepada inicial con pasos de I, o hay quien dice II.
Hemos dado la vuelta por el mismo recorrido de subida para llegar al coche y completar el itinerario. No sin después pasar por el pueblo de Nocito a dar un paseo y tomar una cerveza en el restaurante Ortás.