Santo Domingo de Silos. Desfiladero de La Yecla

La Ruta del Desfiladero de la Yecla es un paseo fácil y muy atractivo de un kilómetro y medio (ida y vuelta / 20 minutos) que discurre por unas pasarelas colgadas sobre las aguas del arroyo El Cauce, que atraviesan un estrecho cañón de paredes de roca caliza. Esta preciosa ruta apta para toda la familia se encuentra a 3 kilómetros de Santo Domingo de Silos, una localidad burgalesa con mucho encanto.

La Ruta del Desfiladero de la Yecla está situada en la Sierra de la Demanda de Burgos, dentro del recientemente declarado Parque Natural Sabinares del Arlanza-La Yecla, que abarca más de 26.000 hectáreas, el valle medio del Arlanza, las Peñas de Cervera, el Cañón del río Mataviejas, la Meseta de Carazo, el Monte Gayubar y las Mamblas.

Para acceder al inicio de la ruta desde Santo Domingo de Silos hay que seguir la carretera BU-910 y recorrer unos 3 kilómetros hasta llegar a dos túneles continuos que atraviesan las Peñas de Cervera.

Peña Cervera es una elevación de la Sierra de la Demanda situada junto al municipio de Espinosa de Cervera, de Santo Domingo de Suso y de Barriosuso con su ermita mozárabe de Santa Cecilia en la provincia de Burgos.

Hay que destacar que esta ruta transcurre paralela a los túneles de la carretera y dispone de dos entradas, una antes del primer túnel y otra a la salida del segundo túnel. Nosotros optamos pora primera alternativa.

Después de aparcar el coche a la derecha de la carretera cruzamos el asfalto para comenzar a bajar por unas escaleras que nos llevaron hasta las pasarelas metálicas protegidas con barandillas, que estaban fijadas a las paredes verticales del Desfiladero de la Yecla.

El angosto desfiladero, horadado por la acción de las aguas del Arroyo el Cauce durante millones de años, tiene zonas con una anchura que apenas llega a los dos metros y casi se podían tocar las dos paredes de roca. Además del paso estrecho destacaba la altura de las paredes verticales que se elevaban hacia el cielo. . En las cumbres anidan más de 100 parejas de buitre leonado.

Durante todo el recorrido nos acompañó el sonido de las aguas del arroyo El Cauce, que formaba sumideros, pequeñas cascadas, rápidos y las curiosas «Marmitas de Gigantes¡»

Durante el paseo pudimos contemplar multitud de buitres leonados que sobrevolaban el cielo azul y de vez en cuando se posaban en los riscos de las peñas del Desfiladero de la Yecla.

Al final del recorrido de las pasarelas del estrecho cañón se abría y el camino ascendente nos llevaba hacia la carretera, llegando hasta el final del segundo túnel. Desde aquí se podía completar la ruta circular volviendo por la acera del interior de los dos túneles o volver a cruzar de nuevo el Desfiladero de la Yecla.

Nosotros decidimos regresar por el mismo camino y seguir disfrutando del espectacular paisaje.

Es un sencillo paseo apto para toda la familia y que merece la pena disfrutar de esta maravilla de la naturaleza.