Urbanización Playa de Verdicio - San Juan de Nieva

Del tramo costero asturiano entre Xivares y la ría de Avilés solo nos quedaba por conocer esta parte entre la Playa de Verdicio y el faro de Avilés, así que aprovechando el buen tiempo allá que nos fuimos.
La playa de Verdicio está situada muy cerca del Faro Peñas y es una playa virgen realmente bonita. El camino empieza siguiendo el muro de la urbanización situada al lado de la playa, pero aunque los mapas señalan un puente que permite cruzar la laguna, ya no existe, por lo que tuvimos que bordearla por la playa al lado de la duna para llegar a una casa situada al otro lado del Arroyo de Budores, que antes de llegar al mar forma una laguna en la que siempre es fácil ver patos.
Desde aquí subimos hacia la zona de aparcamiento de la playa Carriciega, que veremos desde arriba, para continuar el camino hacia La Granda. Antes de llegar al pueblo encontramos el camino de acceso a la Playa Aguilera, una playa salvaje que cuando la marea está muy, muy baja se comunica con las de Verdicio y Carriciega.
Sin entrar en La Granda seguimos ruta hacia La Parada y Puerto Llampero. Este último lugar nos pareció muy interesante, desde el camino se ve el pequeño puerto y las ruinas de una antigua cetárea. Al aproximarnos se puede ver lo que queda del Molín del Puerto, un antiguo molino reconvertido en restaurante que fue destruido por una avenida de agua del arroyo que desemboca allí mismo.
A la salida de Puerto Llampero pasamos al lado del castro Castiello, para alcanzar las playas de Portazuelos y la Riba Pachón, dos playas totalmente contaminadas por las cenizas vertidas procedentes de la siderurgia de Avilés. Se aprecian las pistas por las que se bajaban las cenizas hasta la playa y el edificio al que llegaba el teleférico de Cabo Negro, a través del que llegaban las cenizas procedentes de Avilés.
En este punto nos alejamos de la línea de costa hasta llegar a las proximidades de la Playa de Xagó, una playa abierta y salvaje que es un paraíso para los amantes del surf. Bajamos a la playa por un pindio sendero, pero sin mayor complicación y la atravesamos en toda su longitud para abandonarla por el extremo más cercano al pueblo de Nieva.
Nosotros llegamos cuando la marea estaba baja por lo que recorrimos la playa al lado del mar, pero si la marea está alta puede recorrerse por un camino situado detrás de la duna.
Una vez fuera de la playa nos toca subir hasta el pueblo de Nieva, a cuya entrada se encuentra la capilla de San Juan de Nieva. Desde aquí solo nos queda acercarnos al Faro de Avilés por los senderos que salen de este pueblo.
En las proximidades del Faro todavía nos dio tiempo a buscar los restos de las baterías y el nido de ametralladoras que todavía pueden verse.
La senda litoral asturiana nunca defrauda y siempre te descubre rincones muy interesantes.